El Seprona certifica que había norovirus en el río Mendo durante el brote de gastroenteritis

Barral muestra el atestado de la Guardia Civil, realizado con análisis de Augas de Galicia, y acusa a Ethel Vázquez de “mentir” | La conselleira dice ahora que no eran valores relevantes

La alcaldesa de Betanzos, ayer en la rueda de prensa. |   // L.O.

La alcaldesa de Betanzos, ayer en la rueda de prensa. | // L.O. / A. Pérez

Un informe que el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil acaba de remitir al juzgado de Betanzos contradice las afirmaciones de la Consellería de Infraestructuras sobre la inexistencia de norovirus en el río Mendo durante el brote de gastroenteritis que se registró este verano en Betanzos.

La alcaldesa betanceira, María Barral, hizo público ayer el atestado de este cuerpo de la Guardia Civil, realizado en base a las pruebas analíticas realizadas por Augas de Galicia, y que certifica la presencia de norovirus en las aguas del río del que se suministra la población de Betanzos. Entre otros puntos, en las inmediaciones de las depuradoras de Oza-Cesuras y Curtis.

Los análisis realizados durante el pasado mes de junio a partir del día 12 arrojan siempre un resultado positivo en norovirus en alguno de los puntos de muestreo, y en algunas ocasiones, hasta en los siete puntos.

El atestado, al que ha tenido acceso este diario, apunta además a la existencia de deficiencias en la depuradora de Oza-Cesuras.La alcaldesa brigantina acusa al departamento autonómico que preside Ethel Vázquez de “mentir” y “jugar con la salud de los betanceiros”. Además, indicó que el Seprona llegó a solicitar al Concello de Oza-Cesuras una documentación que no aportó.

“Le pedimos las analíticas por activa y por pasiva y nos las ocultó”, afirmó Barral, que recordó que el Concello mantuvo siempre que el origen del brote estaba en el río, extremo al que apuntaban los análisis de la concesionaria del abastecimiento.

“Por más que pedimos públicamente los resultados de las analíticas de Augas de Galicia, nunca los tuvimos, y la conselleira decía públicamente que el río estaba bien y que el problema estaba en la red de Betanzos”, reprobó ayer Barral, que cargó también con dureza contra el grupo municipal del Partido Popular, al que acusó de utilizar la crisis del agua con motivos “políticos”.

La regidora brigantina leyó un artículo de opinión publicado por esta formación en el periódico de los comerciantes de Betanzos que decía literalmente que no se había encontrado “ni rastro” de norovirus en el río y acusaba a la alcaldesa de “confundir y engañar a la población”.

A consulta de este diario, la Consellería de Infraestruturas, que hasta ahora siempre había negado la existencia de norovirus, asegura que en el Mendo “no se detectó un valor de norovirus diferente al que se encuentra en otros ríos” y “que explique el brote”. La consellería apunta además que el agua debe ser potabilizada por Betanzos y argumenta que el problema se solucionó cuando se limpió la red.Vázquez a su vez acusó a Barral de ser ella la que mintió y lamentó que “recurra al victimismo” para “eludir sus responsabilidades directas”.

La consellería insistió, en un comunicado enviado ayer, que Augas de Galicia mantiene que los valores de norovirus en las analíticas “no son superiores a los parámetros” existentes en otros ríos por lo que no pueden verse como “el origen del problema sanitario”. Agregó que a día de hoy “sigue sin estar aclarado” si el origen fue la potabilizadora, las canalizaciones o los depósitos.

Explicaciones que no convencen al Concello brigantino, que considera “gravísimo” que la Xunta ocultase información en un caso de salud pública. Barral cifró en 800.000 euros el coste que esta crisis tuvo para Betanzos.

“Vamos a llegar hasta el final”, recalcó la regidora, en relación a la posibilidad de saber si se pueden achacar responsabilidades en el brote de gastroenteritis que afectó al municipio durante casi dos meses, obligando al Concello a fletar cisternas con agua y repartir garrafas a la ciudadanía.