Arteixo retira el hórreo que impedía el paso de ambulancias por el núcleo de Suevos

“La ambulancia tuvo que venir a por mi madre y, aunque pasó con muchas dificultades, luego tuvo que salir por el otro lado”, relata un vecino de Suevos que no quiere revelar su nombre. Los vehículos de emergencias ya pueden circular por las vías interiores de este núcleo con más facilidad. Los operarios de la empresa contratada por el Ayuntamiento de Arteixo han retirado en las últimas semanas un hórreo que impedía el acceso de los vehículos de servicios de grandes dimensiones.

El hórreo en cuestión se encontraba en una vía estrecha que nace frente al centro social. Cuesta abajo, la calle toma una curva a la derecha antes de llegar a donde se encontraba la infraestructura, que obstruía la plataforma destinada al paso de los vehículos. La estrechez se acrecentaba por la cercanía con la pared de la casa de enfrente en una ligera curva.

“Tuvimos constancia de casos en las que fue la ambulancia allí a buscar a una persona y se quedó junto al hórreo porque no podía pasar. Tuvieron que bajar con la camilla unos 100 metros para recoger a la persona enferma en su casa y, luego, subirla de vuelta”, cuenta el concejal de Medio Urbano y Medio Rural, José Antonio Calvelo. Un vecino de la zona cuenta que, en una ocasión, el vehículo de emergencias sí fue capaz de pasar para recoger a su madre gracias a la pericia del conductor. Sin embargo, para volver a salir tuvo que hacerlo por el otro extremo del pueblo, al resultarle imposible abandonarlo marcha atrás a través de la calle por la que accedió.

El Concello culminó en octubre del año pasado la expropiación del terreno en el que estaba emplazada la estructura. Los propietarios son dueños de varias fincas contiguas en esa parte de Suevos. “Es un tapón que impedía el paso de ambulancias y bomberos, la expropiación no fue un capricho, sino una demanda que pedían los vecinos”, expone Calvelo.

Ahora, el Gobierno arteixán continúa con las actuaciones previstas en otras fincas que expropiaron al mismo tiempo que el hórreo. Los operarios trabajan ahora en un espacio en el que antes había una casa de piedra deteriorada, a unos 100 metros del hórreo. En él se prevé instalar una pequeña plaza con mobiliario y juegos para niños.

El grupo municipal de Alternativa dos Veciños reiteró en varias ocasiones los problemas que ocasionaba este obstáculo y llegó a instalar pancartas para denunciar la situación. Ahora, celebra que el Gobierno local “entrase en razón” y tirase el hórreo.

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