Luto a ambos lados del charco por el empresario betanceiro: “Alfredo era muy amigo, muy querido por todos aquí en Miami”

“Aquí estamos todos consternados”, cuenta José Manuel Brandariz, presidente de la Asociación de Empresarios Gallegos de EE.UU y de la cofradía Galegos Forever, de las que formaba parte Alfredo Díez Seoane, el piloto y empresario natural de Betanzos, fundador de Atlantis Aviation, que falleció el pasado domingo en un accidente aéreo junto a su mujer, su hijo de tres años y dos pilotos de la compañía.

La Policía de Virginia y la Administración Federal de Aviación han abierto una investigación para intentar arrojar luz sobre las causas del siniestro en una zona boscosa de Virginia muy próxima al aeropuerto de Ingalls Field cuando el avión intentaba realizar un aterrizaje de emergencia. En los medios locales, se apuntó inicialmente a una posible indisposición a bordo o a una avería en un motor, explican sus allegados de Miami. Son solo hipótesis que de momento no confirman fuentes oficiales.

A consulta de este diario, la Policía de Virginia explica que la Administración Federal de Aviación (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte han asumido la investigación y que los cuerpos han sido enviados a la Oficina Médico Forense de Virginia para su identificación. La policía detalla en su respuesta que el avión, un IAI Astra 1125 bimotor, partió de Fort Lauderdale y que sus ocupantes se dirigían a Homestead Resort, en Hot Spring, para participar en un evento. Durante el aterrizaje de emergencia, chocó contra unos árboles y después contra la ladera y ardió a consecuencia del impacto.

Un empresario betanceiro, su mujer y su hijo fallecen en un accidente aéreo en Estados Unidos

Los amigos y allegados de Alfredo Díez en Miami preparan una misa para despedir a este empresario de 39 años, a su mujer, Kseniia, y al pequeño de ambos. Será multitudinaria, vaticinan: “Hoy [por ayer] no he parado de recibir llamadas, Alfredo era muy querido, muy amigo de todos aquí en Miami” , destaca Brandariz, que conoció a este emprendedor brigantino hace unos diez años, al poco de que Alfredo Díez crease su primera empresa en Miami, el primer escalón de una carrera fulgurante con varios hitos: la puesta en marcha de una escuela de pilotos, la apertura de una empresa de mantenimiento de aviones, la compra de una compañía charter y, recientemente, la fundación de Atlantis Capital, con la ambición de captar capital para explorar el espacio. “Alfredo logró cumplir el sueño americano. Fue un empresario de éxito. Estaba muy contento con lo que había realizado”, destaca Brandariz.

Amigos del betanceiro como Adolfo Pérez Castillo llamaban también la atención sobre su exitosa trayectoria en su sentida despedida en las redes sociales: “ Fue un gran gallego, un ciudadano español que construyó Atlantis Flight Academy y Sky Elite Charter en estos últimos años representando bien a España y Galicia en el sur de la Florida”, destacaba. Otros como Kat Ferrari agradecían las oportunidades brindadas por este empresario: “Cuando estaba deprimido, me dieron la oportunidad de trabajar con ellos”.

Las puertas que abrió Alfredo Díez al mercado laboral o, simplemente, a vivir una aventura “inolvidable”, salen estos días a relucir en boca de amigos y conocidos. Como Alfredo Iglesias Varela, coordinador del club UDJ Almeiras, que conoció a Alfredo Díez en el transcurso de un viaje de intercambio con el equipo de cadetes que organizó la entidad con la ayuda de la asociación Galegos Forever. “Me acuerdo muchísimas veces de él, tan activo, tan dinámico, con tantas ideas. Tengo un gratísimo recuerdo de él, con nosotros fue súper atento, muy cercano”, relata este cullerdense, que recuerda con gratitud el recibimiento de este piloto betanceiro, que les mostró todas las instalaciones de su escuela, les explicó con todo lujo de detalles cómo era la educación en EEUU y brindó la oportunidad a todos los niños de ver Miami desde el cielo en varios vuelos de avión: “Fue una experiencia maravillosa” recuerda Iglesias, que llama también la atención sobre la semilla que sembró Alfredo entre los pequeños, que “escuchaban super atentos” las nociones que les daba para emprender en Estados Unidos.

La noticia del fallecimiento del fundador de Atlantis Aviation cayó también como una losa en la Escuela de Pilotos Aeroflota del Noroeste (AFN), donde se formó este emprendedor betanceiro antes de emigrar a EE.UU. “Era una persona luchadora que se abrió paso por sí mismo, un gran emprendedor”, lamenta el director de operaciones de esta empresa, David Fernández.

A lo largo de la jornada de ayer se sucedían las muestras de pesar en su ciudad natal, Betanzos, donde el empresario y su familia eran muy conocidos. También en Monfero, en cuyo colegio, el Virxe da Cela, impartía clase la madre del fallecido y donde abrió su hermana un negocio de turismo rural.

La madre y la hermana de este emprendedor se han desplazado a Virginia para identificar los restos mortales mediante pruebas de ADN.

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