Gallaecia ampliará el vertedero de Campo Gaiosa para multiplicar por cinco la capacidad

Pasará de los 128.000 metros cúbicos que contiene ahora a los 608.000 que permite como máximo la parcela | La Xunta aprobó la modificación de la autorización ambiental integrada

Mapa de la ampliación prevista en el vertedero de Campo Gaiosa.

Mapa de la ampliación prevista en el vertedero de Campo Gaiosa. / LOC

Daniel Abelenda Lado

Daniel Abelenda Lado

La empresa Gallaecia Servicios Ambientales S.L. pretende incrementar la capacidad de almacenamiento del vertedero de Campo Gaiosa en Areosa, situado junto al de Sogama, en la parroquia cercedense de Queixas. La instalación actual, en fase preliminar, cuenta con capacidad para 128.000 metros cúbicos de residuos. Ahora, la titular de la instalación quiere multiplicar casi por cinco esta cifra para ser capaz de gestionar un total de 608.544 metros cúbicos de basura no peligrosa.

La Dirección Xeral de Calidade Ambiental Sostibilidade e Cambio Climático de la Xunta dio luz verde en febrero de este año a la modificación y refundido de la autorización ambiental integrada para este vertedero de Campo Gaiosa. Gallaecia solicitó en abril de 2023 cambiar este documento para permitir la ampliación del complejo de tratamiento de basura. Actualmente, cuenta con una fase inicial y un vaso que contienen 128.000 metros cúbicos de residuos en una parcela de 51.259 metros cuadrados de extensión total.

El vaso en el que se acumulan los residuos ahora está situado al sur de la finca, mientras que la parte norte se encuentra libre. Es en esa zona del complejo donde la empresa proyecta habilitar una nueva zanja de mayores dimensiones en la que depositar los residuos. Soportará un volumen de 480.544 metros cúbicos. En total, tendrá autorización para llegar a albergar 608.544 metros cúbicos de residuos, 4,75 veces más que los que soporta en la actualidad.

El proceso para llevar a cabo esta ampliación constará de varios pasos. El primer paso será ejecutar la zanja en la mitad norte de la parcela, denominada Fase A. La obra propone una plataforma única de fondo a una cota de 350 metros con el fin de facilitar la explotación del vertedero y aumentar la distancia de seguridad del túnel de ferrocarril, de ADIF, que discurre por debajo del basurero.

Una vez completado el nuevo vaso, se trasladarán a él los residuos que se encuentran el depósito actual. Una vez vacíen este, y mientras comienza a operar la nueva instalación en la zona norte, comenzará otra obra para acondicionarlo. Restaurarán e impermeabilizarán los fondos y las paredes. Se establecerá una plataforma, también, a 350 metros de cota y se mantendrá la capacidad actual de 128.000 metros cúbicos.

La ampliación del vertedero conllevará la instalación de un vallado perimetral en toda la instalación. Se dispondrá de una nueva red de piezómetros (aparatos para medir el nivel del agua subterránea). Cinco de los seis recogidos en la autorización ambiental integrada están inoperativos. También se instalarán cuatro bombas en cada fase del vertedero. Dos se destinarán al achique de lixiviados, para los que hay una balsa en una franja paralela a una vía anexa al complejo. Otras dos para las aguas subterráneas. El proyecto permitirá mantener el uso de la caseta utilizada como oficina y para tareas y servicios de control, la fosa séptica, la red eléctrica que alimenta a toda la finca y la báscula para el pesaje de los camiones, aunque prevé cambiarla de ubicación.

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