El Hospital Clínico de Santiago (CHUS) atendió ayer a cuatro de los náufragos rescatados, mientras que los otros dos recibieron asistencia médica en el hospital de la localidad coruñesa de Cee. A última hora de la tarde, los marineros se encontraban prestando declaración en dependencias de la Guardia Civil tras haber sido tratados por psicólogos y haber recibido el alta hospitalaria.
Los seis tripulantes rescatados fueron atendidos en los dos centros hospitalarios al padecer síntomas de hipotermia y uno de ellos, además, un traumatismo en una de sus piernas.
Por el centro hospitalario compostelano se pasó tanto el armador del buque, Víctor Muñiz, como el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña. Allegados y amigos también se acercaron al CHUS para acompañar a los accidentados.
Este periódico pudo hablar con uno de los familiares de David Rodríguez, que explicó que ya han contratado a un abogado experto en cuestiones marítimas para que les asesore en lo que va a pasar en los próximos días sobre el naufragio. El mismo familiar indicaba que David y sus compañeros estaban "muy afectados" y que por el momento "no quieren hacer declaraciones" sobre lo sucedido.
