Un milagro en medio de la tragedia marítima de ayer en la Costa da Morte. Cuatro de los tripulantes del pesquero Sin Querer Dos lograron sobrevivir tras permanecer agarrados a tablas y maderos hasta que alcanzaron uno de los botes salvavidas que se soltaron del barco antes del hundimiento. Los cuatro marineros se lanzaron al agua en cuanto el pesquero de Portonovo se escoró y no pudo recuperar la estabilidad.

Momentos antes de que la embarcación volcase por completo y quedase quilla al aire antes de hundirse a cuatro millas y media del cabo Fisterra, se tiraron al agua y se agarraron a unas tablas que estaban flotado en la zona del naufragio. Tres de ellos se aferraron a un tablero y un cuarto permaneció cerca de ellos agarrado a unas tablas.

Los cuatro supervivientes permanecieron nadando poco más de media hora antes de que los tres que estaban juntos lograsen divisar uno de los botes salvavidas que se soltó del pesquero antes de que se fuera al fondo del mar y lograron alcanzarlo y subirse. Una vez a bordo de la balsa se afanaron en conseguir acercarse a su compañero que aún permanecía en el agua flotando agarrado a unas tablas y que no pudo seguirlos a causa del dolor que le produjo un golpe durante el naufragio. Lograron llegar junto a él y subirlo a la balsa al poco tiempo.

Por su parte, los otros dos marineros supervivientes pudieron subirse a otro de los botes salvavidas antes del hundimiento. Los pesqueros que acudieron en auxilio de los tripulantes tras saltar la señal de socorro lograron recuperar del mar a los seis náufragos que permanecían en los botes salvavidas. Tras ser ayudados y atendidos, los seis marineros fueron llevados a puerto desde donde fueron trasladados a hospitales de Cee y Santiago.