La presencia de la toxina lipofílica (diarreica) se extiende en este mes de marzo por las rías gallegas y obligó a cerrar ya 23 polígonos de los 52 existentes en Galicia. El Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intecmar) decretó ayer la clausura cautelar de dos polígonos más en la ría de Vigo, los de Vigo A y Cangas C, que se unen a los ya cerrados en las rías de Muros-Noia y de Pontevedra.

En la ría de Arousa solo afecta a tres polígonos de casi la treintena existente.