Lo "único bueno de utilizar plástico de un solo uso es que nos ha obligado a abrir los ojos" para luchar de verdad contra la contaminación, asegura a Efe el director de Océanos de Greenpeace Reino Unido, Will McCallum, quien acaba de publicar Deja el plástico (Ed. Península).

Se trata de una guía para eliminar "un material que ha definido nuestra generación" pero que se ha convertido en uno de los principales elementos contaminantes del planeta: la expresión de que "la cultura de usar y tirar ha ido demasiado lejos", afirma.

Cada año, cerca de 13 millones de toneladas de plástico llegan al mar y matan a un millón de aves y a 100.000 mamíferos marinos, según los datos que maneja McCallum, quien añade que en la actualidad "hay al menos 700 especies directamente afectadas" por este material.

McCallum no se muestra excesivamente optimista ante el futuro de los plásticos biodegradables ya que "sólo el 9% del que se genera en el mundo se recicla", lo que resulta "extremadamente grave" porque cada botella de plástico normal "tarda 450 años en degradarse en el océano". En el caso de los océanos, McCallum indica que la causa del 30% de la polución plástica se concentra en las microfibras, "sobre todo de productos cosméticos, champús y ropa".