GERIATRÍA

Qué hacer cuando el termostato de nuestro cuerpo empieza a fallar y nos pone en peligro

A medida que envejecemos nuestro cuerpo se vuelve menos capaz de regular la temperatura interna, y es necesario tomar precauciones

El termómetro del cuerpo se vuelve menos sensible con los años, y hay que tomar precauciones

El termómetro del cuerpo se vuelve menos sensible con los años, y hay que tomar precauciones / Foto de Işıl: https://www.pexels.com/es-es

Esta semana va a ser dura si de calor hablamos, ya que las previsiones de la AEMET han activado todas las alertas por la segunda ola de calor de este verano.

Así que las recomendaciones para reducir el impacto de las altas temperaturas se hacen más necesarias que nunca, en especial para los grupos de población más vulnerables, como son los ancianos. 

El aumento de las temperaturas se ha convertido en un verdadero problema de salud pública, si atendemos a los datos del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), responsable de la creación del sistema de seguimiento de la mortalidad diaria por todas las causas (MoMo).

Este sistemsa estima que durante el periodo comprendido entre finales de abril y comienzos de septiembre de 2022 hubo aproximadamente 4.700 fallecimientos en España relacionados con el exceso de calor.

Esta cifra representa alrededor del 3,2% de todas las muertes registradas, superando el récord de decesos atribuidos a altas temperaturas establecido en 2017 y triplicando el promedio de los últimos cinco años.

Cabe destacar que cerca de 3.800 de estos fallecimientos ocurrieron exclusivamente durante los meses de julio y agosto.

7 recomendaciones para proteger a los más mayores del calor.

7 recomendaciones para proteger a los más mayores del calor.

A más años, mayor vulnerabilidad al calor

Y es que cuantos más años cumplimos, más vulnerables nos volvemos al calor.

Como explica el doctor David Curto, director Médico, Calidad e Innovación de Sanitas Mayores:

  • “Los golpes de calor representan una seria amenaza para la salud de las personas mayores, y es crucial tomar medidas para prevenir su ocurrencia".
  • "A medida que envejecemos, nuestro cuerpo se vuelve menos capaz de regular eficientemente la temperatura interna, lo que aumenta la vulnerabilidad a los efectos del calor extremo”,

Perder esta capacidad de autorregulación “puede desencadenar complicaciones graves, como:

  • Deshidratación
  • Agotamiento
  • Insuficiencia orgánica
  • Incluso la muerte”, alerta el experto.

Por eso “es fundamental que tanto los cuidadores como los familiares estén alerta y tomen medidas de precaución, como mantener una hidratación adecuada, buscar ambientes frescos y eludir la exposición directa al sol durante las horas más calurosas del día”, concluye.

Durante los días más calurosos deben beber agua aunque no tengan sed.

Durante los días más calurosos deben beber agua aunque no tengan sed.

Recomendaciones para que los más mayores no sufran un golpe de calor

Ante esta situación, los expertos de Sanitas Mayores han preparado un listado con una serie de consejos para evitar los golpes de calor en la población mayor:

  • Mantener una correcta hidratación. Con la edad la sensación de tener sed se va reduciendo. Por eso, es absolutamente necesario asegurarse de que la persona mayor bebe suficiente agua durante todo el día, aunque no tenga sed.

Además, para evitar la deshidratación no deben consumir ni bebidas alcohólicas ni con cafeína.

  • Usar ropa ligera y transpirable. Elegir prendas sueltas, de colores claros y fabricadas con materiales transpirables ayuda a mantener el cuerpo fresco y permite una mejor evaporación del sudor.
  • Cuidar la alimentación. Como para todo, es esencial que las personas mayores sigan una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, procurando reducir al mínimo las comidas copiosas o calientes.
  • Permanecer en lugares frescos. Para los días más calurosos lo mejor es recurrir al aire acondicionado. Si esto no fuera posible, se pueden utilizar paños húmedos y ventiladores para refrescar el ambiente.
  • Evitar actividades extenuantes. Limitar la realización de actividades físicas intensas durante los días calurosos, especialmente al aire libre. El esfuerzo excesivo puede aumentar la temperatura corporal y el riesgo de golpe de calor.
  • Utilizar protección solar. Como a cualquier edad, es necesario aplicar fotoprotectores de forma regular. Además, sobreros y gafas de sol contribuirán a reducir la exposición al sol. 
  • Mantener contacto social. Es esencial que las personas mayores estén en contacto con familiares, amigos y vecinos durante los días calurosos, ya que permite una supervisión mutua y la posibilidad de recibir ayuda en caso de necesitarla.

Si a pesar de tomar todas las precauciones, la persona mayor sufriera un golpe de calor, es importante conocer los síntomas y así, poder atenderle precozmente.

Los expertos en geriatría de Sanitas recomiendan buscar atención médica de manera urgente en caso de que aparezcan:

Mareos

Confusión

Piel enrojecida y seca

Pulso rápido

Dolor de cabeza.