La Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE) cerró el año 2011 con un incremento del 8,65% en las ventas por productos de juego en Galicia, respecto de 2010, un 3% más del crecimiento que experimentó a nivel estatal, donde los ingresos aumentaron un 5%, según informó ayer el delegado territorial en Galicia de la ONCE, Manuel Martínez Pan, durante la presentación en A Coruña de la memoria del pasado ejercicio.

Un año en el que la incorporación de nuevos canales de venta y la buena acogida de los sorteos extraordinarios, con especial incidencia del celebrado el 11 de septiembre de 2011, ayudaron a conseguir 1.956 millones de euros a nivel estatal (75.997.959 de ellos en Galicia), de los cuales algo menos de la mitad (966,4 millones de euros) se destinaron directamente a premios, dirigiendo la otra mitad a inversión social.

Estas cifras "llenan de satisfacción a la ONCE", en palabras de Martínez Pan, aunque se sitúan en medio de una caída de ventas de 500 millones que la Organización viene sufriendo desde 2001. Junto a este descenso, también se encuentra la pérdida de cuota de mercado en el sector del juego, ya que en 2011, la ONCE sólo representó un 7% del total, ante lo cual el delegado territorial apuntó que "hay que acabar con el mito de que en época de crisis la gente juega más".

El año 2011 fue para la ONCE "un año único", indicó el delegado territorial, "con un gran impacto económico y social". La inversión de 9,1 millones de euros en acción social lo demuestra, un millón más respecto a 2010, destinados a Galicia para afianzar la inclusión de las personas con discapacidad a través de ámbitos como la educación, la tecnología accesible o el empleo. Durante el año pasado se realizaron 827 contratos indefinidos en todo el territorio estatal, mientras que en Galicia se quedaron en tan solo 19, aumentando así la cifra a un total de 714 vendedores en la comunidad gallega.