El entonces arzobispo de Buenos Aires Jorge Bergoglio, actual papa Francisco, declaró en noviembre de 2010 ante un tribunal, en calidad de testigo, que se había reunido en dos ocasiones con el exdictador Jorge Videla para interferir por los dos sacerdotes jesuitas Orlando Yorio y Francisco Jalics, detenidos por el Ejército y posteriormente liberados.

El diario bonaerense Clarín difundió ayer en exclusiva un vídeo (de casi cuatro horas de duración) de la comparecencia de Bergoglio durante el juicio oral, que tuvo lugar el 8 de noviembre de 2010 en un tribunal federal de la capital y en el que se juzgaban crímenes de lesa humanidad cometidos en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada.

En su declaración, en presencia de fiscales, querellantes y defensores, Bergoglio aseguró que se había reunido en dos oportunidades con Jorge Videla y con el antiguo jefe de la Marina y número dos de la dictadura, Emilio Massera, para interceder por los dos sacerdotes jesuitas.

Por su parte, Graciela Fernández Meijide, exministra de Desarrollo Social de Argentina, activista de los Derechos Humanos y miembro de la Comisión Nacional de la Desaparición de Personas, certificó ayer en Barcelona que el papa Francisco "nunca estuvo implicado con la dictadura". Madre de un joven desaparecido en la dictadura, conoció a Bergoglio porque colaboraron "en el trabajo social".