"Seguimos fabricando todo en Galicia, nada en Asia. Es uno de nuestros grandes handicaps", explica la diseñadora de moda Patricia Avendaño, la única gallega que mostrará su colección en un desfile esta semana en la Pasarela Gaudí Novias, de Barcelona. Avendaño aprovecha esta ventana para sacar pecho y decir claramente que "hay que promocionar la moda española". "Aquí, había antes mucha gente muy preparada en este sector. Si fabricamos fuera, creamos pobreza para el país. Por eso, nunca contemplé llevar la producción al exterior", asegura.

Asegura Avendaño -cuyo desfile en la Gaudí se desarrollará este jueves a las siete de la tarde en el contexto de la Barcelona Bridal Week- que su marca intenta "sobrevivir contra la crisis en este país, donde no va quedando nada". El antídoto para evitar la desaparición de este terremoto económico, financiero y laboral se basa en "trabajar más y emplear mucho esfuerzo, mediante el ajuste -por ejemplo- de los costes de producción".

Precisamente, el guardar toda la producción en Galicia permite que cualquier adaptación o cambio en un vestido puede realizar en tiempo y forma. "Es un trabajo a medida, muy parecido al de la alta costura", señala la creadora gallega.

Avendaño vivió la primera edición de la Pasarela Gaudí hace 23 años, trabajando para otra empresa antes de la creación de su marca con la que no ha faltado nunca. "La evolución en estos años de la pasarela, de la que formo parte del comité organizador, ha sido brutal. La afluencia de clientes del exterior ha sido brutal", apunta.

En el año 2011, por ejemplo y según el informe de la feria, asistieron a la Barcelona Bridal Week unos 15.000 compradores. De estos, el 60% eran extranjeros.

Para la creadora gallega, las pasarelas suponen un empuje para el sector de la moda, una forma de dar a conocer un trabajo. Por ello, no duda en calificar de "gran pena" la desaparición de pasarelas en Galicia, en especial de Galicia Moda o Campus Stellae. "Falta ayuda institucional".