Un fármaco básico para tratar la epilepsia escasea desde hace meses en las farmacias gallegas y obliga a los enfermos a peregrinar de botica en botica para intentar encontrarlo. Se trata del Noiafren „comercializado por Sanofi„ y que contiene un principio activo que no comercializa ningún otro laboratorio.

Este medicamento tiene dos presentaciones: una con dosis de 10 miligramos y otra de 20 miligramos. Según el coordinador del grupo de epilepsia de la Sociedad Gallega de Neurología, Javier López, desde principios de año se está sufriendo el desabastecimiento o bien de una de estas presentaciones o bien de la otra.

Pocas veces faltan las dos al mismo tiempo, de manera que cuando el paciente no encuentra la caja que se le ha recetado, se le ajusta la dosis. "Y si así no lo consiguen, los pacientes pueden acudir a la farmacia del hospital donde aún tenemos stock", explica Javier López.

Sin embargo, este neurólogo reconoce que es "un follón" para los enfermos de epilepsia. "Tienen que andar peregrinando de farmacia en farmacia. Es una lata", sostiene. Y explica que en pueblos pequeños si no encuentran el fármaco en su farmacia habitual se ven obligados a desplazarse varios kilómetros a otra localidad para conseguirlo. No tomarlo conlleva graves riesgos para el paciente. De ahí, que López insista en que "no desesperen" y, en caso de no encontrarlo, acudan al servicio de farmacia de los hospitales.

Es un medicamento muy barato (de 2,50 euros la caja de 10 miligramos), por lo que a los laboratorios no les compensa su comercialización.