“Empezamos con un equipo pequeño, de una decena de personas, y ahora somos unos cuantos centenares. El éxito de este proyecto es el éxito de todos”, explica Elia Torroella, directora del departamento de Investigación y Registros de Hipra, la farmacéutica española que, si todo va bien, a lo largo de 2022 pondrá una nueva vacuna contra el COVID-19 en el mercado: la primera de este tipo desarrollada en España.

“En enero empezaremos la última fase de los estudios clínicos. Entre febrero y marzo, cuando tengamos los datos de seguridad y eficacia, pediremos su autorización. La vacuna de Hipra podría estar aprobada ya para el segundo trimestre del año 2022. Para entonces, calculamos que ya habremos producido 600 millones de dosis y estaremos preparados para entregar las vacunas tan pronto como se nos pida”, adelanta la científica.

A principios de año, anuncia Torroella, la farmacéutica empezará a reclutar los 3.000 voluntarios que formarán parte de la fase final de los ensayos clínicos. El estudio se llevará a cabo en 18 centros hospitalarios de España y, según explica la científica, también se extenderá a varias instituciones de Portugal, Italia y Vietnam (este último país ha adquirido ya un total de 50 millones de dosis del nuevo suero).

En las primeras fases de los ensayos clínicos, la vacuna de Hipra se probó en personas que no habían recibido ninguna inmunización y obtuvo buenos resultados. Ahora, el fármaco se testará como dosis de refuerzo y, más allá de su seguridad y eficacia, también se estudiará su eficacia frente a las variantes emergentes como ómicron. “Las expectativas son buenas”, explica la científica.