Cribado de cáncer de cérvix en A Coruña: "Una prueba sencilla puede prevenir una dolencia grave"

El cáncer de cuello uterino, también conocido como cáncer cervical o de cérvix, es el segundo más frecuente en mujeres en nuestro entorno, y el cuarto a nivel general en todo el mundo. Consiste en la aparición y crecimiento de células tumorales en el cuello o parte baja del útero, que conecta con la vagina, y su principal causa es la infección por el virus del papiloma humano (VPH). Para tomarle la delantera a esa dolencia, el área sanitaria de A Coruña y Cee puso en marcha, en la última semana de 2023, un programa de cribado poblacional, que pretende llegar a 133.000 vecinas, con edades comprendidas entre los 35 y los 65 años.

Aprovechando la conmemoración de la Semana europea de prevención del cáncer de cuello uterino, recogemos las claves del cribado de esa enfermedad, que no produce síntomas, de ahí que suela diagnosticarse en estadios muy avanzados. La detección precoz, cuando todavía no se ha manifestado, permite aumentar las posibilidades de curación. Además, las pruebas realizadas en el marco del cribado también hacen posible identificar lesiones premalignas evitando que evolucionen a cáncer, por lo que se puede modificar su evolución.

“Hasta ahora, el cribado de cérvix muchas veces era oportunista: la mujer venía a su centro de salud, y tú le hacías las pruebas pertinentes que correspondiesen. En este caso, se trata de un cribado poblacional, por tanto, a todas las mujeres que cumplan las condiciones para participar en él, se les va a ofertar, al igual que sucede con el cribado mamográfico”, explica Pilar Patiño, matrona del centro de salud de Labañou, antes de especificar que esos “criterios” son “pertenecer a la franja de edad de 35 a 65 años”, y “no estar histerectomizada [tener útero] ni padecer ya un cáncer de cérvix”.

La primera de las pruebas previstas en el cribado es la denominada VPH-AR, para detectar si existe infección por el virus del papiloma humano. Las participantes en el programa podrán realizarse el test en casa o bien en la consulta de la matrona, en su centro de salud. Si da positivo, habría que hacerse después una citología.

“A las mujeres que reúnen los requisitos para participar en este cribado, les llegará una carta de invitación de la Consellería de Sanidade a sus domicilios, o bien un SMS, si están dadas de alta en ese sistema. La primera prueba del cribado es sencilla e indolora y, a diferencia de la citología, puede ser realizada tanto en un centro sanitario como por la propia mujer en su casa. Esto es posible porque el VPH se detecta en el fluido vaginal y no es necesario coger las células del cuello del útero. Por ello, las mujeres podrán decidir la modalidad para participar en el cribado”, apunta la matrona del centro de salud de Labañou, y detalla: “Si optan por la autónoma, Sanidade les enviará un kit con el material y la información necesaria para que puedan realizarse la prueba correctamente en su domicilio y, si prefieren que se la haga un profesional sanitario, se les dará cita con la matrona de su centro de salud”.

“Si la prueba del VPH es positiva y detecta la infección”, prosigue Pilar Patiño, “el siguiente paso será verificar que no hay anomalías en estas células, por lo que será necesario realizar una citología”. “En el caso de que el resultado sea anormal, la mujer será citada para un estudio ginecológico más detallado, con el objetivo de descartar una lesión premaligna o maligna”, expone la matrona del centro de salud de Labañou. “Si está todo bien, le enviarán la respuesta de que el VPH es negativo, y le informarán de que, en el periodo de cinco años, la volverán a invitar a realizar el cribado”, agrega Patiño, antes de hacer hincapié en que el cribado de cérvix “es algo muy sencillo, que puede prevenir una enfermedad importante”.

“Si tienes el VPH y lo dejas ahí 10-15 años, puede desencadenar un cáncer de cérvix, pero el cribado es una forma muy fácil de evitarlo. La vacunación frente al VPH en las franjas de edad en las que está indicada, el uso del preservativo en las relaciones sexuales y desterrar el tabaquismo son medidas de prevención primaria. La secundaria es el cribado, por eso animo a todas las mujeres que sean invitadas a participar”, concluye.