El Premio Pritzker de arquitectura reconoce la “normalidad extraordinaria” de Riken Yamamoto

El japonés se hace con el galardón por una obra crítica con la modernidad y al servicio de las personas

Agencias

El arquitecto japonés Riken Yamamoto ha sido galardonado con el premio Pritzker 2024, según anunció la institución, que define a Yamamoto como un “defensor social” que establece un parentesco entre los ámbitos público y privado, inspirando sociedades armoniosas a pesar de la diversidad de identidades, economías, políticas, infraestructuras y sistemas de vivienda.

“Por crear conciencia en la comunidad sobre cuál es la responsabilidad de la demanda social, por cuestionar la disciplina de la arquitectura para calibrar cada respuesta arquitectónica individual y, sobre todo, por recordarnos que en la arquitectura, como en la democracia, los espacios deben ser creados por la voluntad. Riken Yamamoto es nombrado ganador del Premio Pritzker 2024”, señala el fallo del jurado.

Para el jurado, en su larga, coherente y rigurosa carrera, Riken Yamamoto ha logrado producir arquitectura como fondo y primer plano de la vida cotidiana, desdibujando los límites entre sus dimensiones pública y privada y multiplicando las oportunidades para que las personas se encuentren espontáneamente, a través de estrategias de diseño precisas y racionales. En este sentido, apunta que su arquitectura expresa claramente sus creencias a través de la estructura modular y la simplicidad de su forma. “Sin embargo, no dicta actividades, sino que permite a las personas dar forma a sus propias vidas dentro de sus edificios con elegancia, normalidad, poesía y alegría”, añade.

Todo el espacio del edificio de la Universidad de la Prefectura de Saitama (1999), cita como ejemplo el jurado, está concebido como una comunidad. También señala que los dos departamentos para que estudiantes e investigadores trabajen juntos en la Universidad del Futuro, Hakodate (2000), o la fachada de vidrio transparente con lamas para exponer el funcionamiento interno del departamento en la Estación de Bomberos de Hiroshima (2000) ejemplifican su creencia en el concepto de transparencia como reflejo de la funcionalidad y accesibilidad del espacio tanto para los usuarios como para los espectadores.

“Yamamoto ha ampliado la caja de herramientas de la profesión tanto hacia el pasado como hacia el futuro para poder dar cada vez, de modos muy diferentes y a escalas muy diferentes, la respuesta más pertinente a los desafíos tanto del entorno construido como de la vida colectiva”, añade.

Según la organización, el arquitecto de Yokohama está profundamente profundamente arraigado en la defensa de la vida comunitaria y afirma que el valor de la privacidad se ha convertido en una sensibilidad urbana, cuando en realidad los miembros de una comunidad deberían sostenerse unos a otros.