Nueva matanza en Estados Unidos, esta vez en Colorado, en el Medio Oeste. La policía del Condado de Weld, 55 kilómetros al norte de Denver, encontró ayer a cuatro personas muertas en una casa, dos hombres y dos mujeres. Todo indica que un tal Daniel Sánchez, exnovio de una de las mujeres, Beatriz Silva, irrumpió en la vivienda y mató a tiros a los tres habitantes de la misma, antes de volarse la tapa de los sesos. Sánchez había sido detenido el domingo por malos tratos y secuestro después de atacar a su exnovia, quien le había reclamado la devolución de un préstamo de mil dólares que le había hecho al hombre para que no perdiese su camioneta. Además, la mujer deseaba romper la relación.
Una mujer, tía de las víctimas, identificó a las dos mujeres muertas a balazos como hermanas. La tía dijo que María se había casado hace unos cinco meses y que vivía en la casa con su esposo.
Mientras tanto, en Newtown, continúan los funerales por las 28 víctimas asesinadas el viernes por Adam Lanza en el colegio Sandy Hook. Los niños de la localidad volvieron ayer al colegio tras el paréntesis marcado por la masacre, la segunda peor registrada en EEUU.
Mientras, el presidente Barack Obama expresó su "enérgico" respaldo a la propuesta de prohibir la venta de armas de asalto y a una nueva legislación sobre el control de armas. "Él está activamente a favor del intento de la senadora Dianne Feinstein de revivir la propuesta de reinstaurar la prohibición de las armas de asalto", indicó el portavoz de la Casa Blanca.
Los senadores demócratas Feinstein y Chuck Schumer presentaron un proyecto de ley sobre el control de armas en el Congreso.
Además, un adolescente de Miami, de 16 años, fue detenido después de amenazar en Twiter con perpetrar un tiroteo en su escuela como Adam Lanza en Newtown.
