Un conductor que en la madrugada de ayer se saltó un control de la Policía Local de Vigo desató las alarmas ante la sospecha de que Canceliñas pudiera ir al volante. Enseguida comenzó la persecución, en colaboración con la Guardia Civil y con agentes de Vigo, Nigrán y Baiona. Finalmente el conductor fugado fue interceptado en la rotonda de Sabarís en Baiona. El hombre, imputado por un presunto delito de seguridad vial, escapó porque carecía de carné.

Saturnino Marcos Cancelas, Canceliñas, el enemigo público número 1 desde que hace 18 días secuestró con un cómplice a un médico luso en Arcos de Valdevez y lo soltaron casi 24 horas después en Ponteareas llevándose su coche, sigue jugando al gato y al ratón con las fuerzas de seguridad de ambos lados de la raia. El histórico y peligroso atracador de Mos, de 45 años, abandonó días después a su compañero, Álvaro Miguel dos Santos Barbosa, que fue detenido en Vigo y fue ingresado en la prisión pontevedresa de A Lama.

Los esfuerzos de las fuerzas de seguridad de ambos países, que siguen rastreando los montes del sur de la provincia de Pontevedra y Ourense y el norte de Portugal, no han dado resultado hasta ahora. Le siguen los pasos desde hace tres semanas, pero la incuestionable habilidad para las fugas de Canceliñas y el conocimiento del terreno en el que se mueve lo han convertido en un auténtico desafío.

Los tuiteros, en respuesta a la petición de la Guardia Civil, le han visto en Salvaterra, Salceda, Tui, As Neves... Lo cierto es que al final ninguna de las pistas ha sido correcta aunque algunas tienen más visos de verosimilitud que otras. No se sabe si ha cambiado de aspecto y se cree que ha contactado con amigos.