El Gobierno local afronta su tercera modificación de presupuesto este año, un recurso contable que el PP, en la oposición, convirtió en una de sus principales armas políticas contra el anterior Ejecutivo y que presentaba como sinónimo de pésima gestión económica. Son 2,4 millones de euros que el Ayuntamiento suprime de unos capítulos del presupuesto, fundamentalmente de gastos de personal, para redirigirlos a otros apartados. Tres de cada diez euros de nuevo gasto, 700.000 euros, se dirigen a hacer frente al tercer plazo de las indemnizaciones por las expropiaciones de Someso, anuladas por la Justicia. Este tercer plazo, que se debe abonar antes del 31 de diciembre, suma dos millones de euros.

La teniente de alcalde de Hacienda, Rosa Gallego, volvió a recurrir a la herencia económica del anterior Ejecutivo municipal, coalición de PSOE y BNG, para justificar la nueva modificación presupuestaria, que hoy aprobará de forma inicial la Junta de Gobierno Local. "Ojalá no tuviésemos que hacer un modificativo si todo hubiese estado muy bien presupuestado, pero es que llevamos pagando facturas que nuestro presupuesto no puede ser el real nuestro. Nuestro presupuesto se está dedicando en muy buena parte a pagar facturas de otros años y ya no hablemos de las sentencias. Antes no se pagaba y ahora se paga todo", argumentó Gallego.

El expediente, sin embargo, incluye decisiones exclusivas del Gobierno local que, por sí solas, obligarían a acometer una modificación presupuestaria, como la supresión del seguro médico a funcionarios, que permite ahorrar 426.444 euros, o la eliminación de la paga extra de Navidad de concejales y altos cargos (75.769 euros) para destinar ese dinero a otros fines. Así lo reconoció la edil de Hacienda: "Este modificativo tiene una razón, que es que, aunque no hubiese que pagar ninguna factura, habría que hacerlo para pasar la partida de personal de la paga extra (de ediles y altos cargos) a emergencia social".

De cumplirse las previsiones formuladas por la responsable municipal de Hacienda, será la última revisión presupuestaria con la excusa de remendar la herencia recibida de socialistas y nacionalistas porque, con la de ayer, "en principio, el contador (de las facturas sin pagar) está a cero otra vez".

Según la información facilitada por el Ayuntamiento, que se negó a facilitar el expediente del cambio de presupuesto, la principal fuente de financiación de los 2,4 millones de euros son 827.601 euros por jubilaciones, fallecimientos incapacidades y excedencias de empleados municipales desde el 1 de enero y los 426.444 euros del seguro médico. En total, son dos millones de euros de ahorro en gasto corriente, según Gallego, que no aportó ninguna otra cifra concreta sobre el origen de la financiación de la nueva modificación más allá de los 75.769 euros de la paga de Navidad de concejales y altos cargos, que el Gobierno local destinará al programa de emergencia social para atender a ciudadanos sin recursos. "Hemos pasado -presumió Gallego- de los 300.000 euros que reservó el bipartito en 2011 para este programa municipal a los 735.770 euros actuales, lo que supone un incremento del 145%".

Respecto al destino del dinero, además de los 700.000 euros para Someso y las ayudas sociales, la edil únicamente citó 102.714 euros de indemnización, por sentencia firme, por una licencia mal concedida al pub Le Club en 2003; 109.000 euros de facturas de telefonía de 2009 y 2010; y una factura de la planta de Nostián de 2011 de la que no precisó importe.