Las inversiones anuales de las administraciones en los ayuntamientos se acogen con prudencia al ser anunciadas, con las obras de grandes infraestructuras en marcha o a punto de emprenderse. Más tarde, cuando los proyectos concluyen, se digieren con más elocuencia, acompañadas de profusión de abrazos y agradecimientos. Sobre todo si ese momento de culminación coincide con la cercanía de un proceso electoral. El Concello coruñés acaba de conocer las partidas presupuestarias que recibirá del Estado para el año 2015 y en las próximas semanas se enterará de las aportaciones del Ejecutivo gallego. Las inversiones de unos y de otros serán convenientemente recordadas por el Gobierno local desde ahora hasta el próximo mayo, un periodo marcado por el agotamiento de la legislatura de Carlos Negreira y la celebración de elecciones municipales.

El proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) dedica a A Coruña y a su área de influencia más próxima una inversión superior a la de este año que tiene como principal objeto la finalización de estratégicas infraestructuras. Es inmediata la conclusión de la tercera ronda con el tramo Lonzas-A Zapateira y la ampliación de la pista de Alvedro, proyectos iniciados hace tiempo y que tendrán su correspondiente inauguración en fechas preelectorales. También deberían dar un acelerón las distintas obras del puerto exterior, con la costosa prolongación del contradique a la cabeza. Estos tres proyectos acaparan solo para 2015 un total de 85,5 millones de euros de inversión.

La Xunta, por su parte, ultima el diseño de unos presupuestos para el próximo año que, si se tienen en cuenta las partidas consignadas para el presente ejercicio y la evolución de las obras en los últimos meses, podrían rebajar la cuantía general para importantes infraestructuras de la ciudad. Porque las nuevas urgencias del Complejo Hospitalario Universitario (Chuac) ya están inauguradas; la cinta del tramo autonómico de la tercera ronda está a punto de cortarse; como también ocurrirá con otro tramo del trazado soterrado de O Parrote que estará abierto antes del próximo mayo. Estas tres obras requirieron este año 21,7 millones de euros. Si en cada una quedasen trabajos pendientes para 2015, las partidas presupuestarias serían inferiores.

La inversión estelar del Gobierno de Feijóo en la ciudad en 2015 será la rehabilitación integral de la Fábrica de Tabacos, inmueble en desuso que se transformará en sede de diversos órganos judiciales, y para la que entre 2014 y 2016, cuando está prevista la apertura, hay casi 20 millones presupuestados.

A continuación se resumen las partidas presupuestarias principales del Gobierno y de la Xunta para las principales infraestructuras de la ciudad y la comarca:

E Tercera ronda. Quedan dos partidas estatales por ejecutar: 11,2 millones el año que viene para rematar las obras en la AC-14 entre Lonzas y A Zapateira y 4,6 para el siguiente, para posibles demoras. Se prevé una inauguración por todo lo alto próxima a la cita con las urnas. Con el vial ya en marcha en el primer trimestre de 2015, deberían activarse las obras de ampliación de Alfonso Molina, el Vial 18 y la pasarela de Pedralonga, como señaló esta semana el alcalde.

E Puerto exterior. La inversión del Estado sube en un año de 48,6 a 59,2 millones. El contradique, cuya ejecución supera los 45 millones, y obras complementarias en la dársena de Langosteira se llevan las partidas más altas. Hay prisa por acabar el enlace viario desde la AG-55, para el que se reservan 11,4 millones, pero no para la conexión ferroviaria, aún en fase de estudio, sin trazado, con alegaciones a las propuestas presentadas por Fomento y solo 65.000 euros de asignación.

E Alvedro. La ampliación terminada de la pista del aeropuerto tiene fecha reservada de alcance electoral en los primeros meses de 2015, año de la última partida, de 14,9 millones. La modernización de distintas áreas de la terminal estrena montantes: 233.000 euros el próximo año y 2,2 millones hasta 2017.

E Alfonso Molina y Meicende. La financiación de la ampliación del vial de acceso a la ciudad y la construcción del Vial 18 que enlazará la tercera ronda con la AP-9 corresponden a Audasa, pero el Estado reserva gastos mínimos, de entre 10.000 y 100.000 euros, para estos proyectos. Es más alta la partida para una carretera de circunvalación que eliminará el tráfico pesado en Meicende: cuatro millones hasta 2016.

E Fábrica de Tabacos. La obra está en marcha pero va con retraso -se preveía el inicio a comienzos de 2014 y no empezó hasta el verano- y la empresa que la realiza, Antalsis, entró en preconcurso de acreedores, aunque garantiza la ejecución. La Xunta fija la apertura de la nueva sede judicial en 2016, año hasta el que habrá financiación. Hubo 3,5 millones de euros en 2014, están previstos 11,9 para 2015 y otros 4,1 para 2016.

E Estación intermodal. Sin inversión hasta este año, la tendrá en el siguiente, aunque para un macroproyecto que llegó a presupuestarse en 180 millones y que tras descartar servicios como un hotel y un centro comercial, se queda expuesto a inyecciones estatales de 8,2 millones, de los que solo 200.000 se consignan para 2015. Sobre la mesa, pero sin concreción, está el traslado de la estación de autobuses a las instalaciones de San Cristóbal.

E Estación de autobuses. La Xunta contribuye este año con 470.000 euros en la mejora de la estación de la calle Caballeros (accesos, pavimento, movilidad). El presupuesto guarda partidas más altas, de 1,2 millones, hasta 2017, probablemente pensadas para el traslado hasta la intermodal, pendiente de un convenio entre Xunta, Concello y Fomento del que no se conocen avances.

E Nuevas partidas. La publicitada "puesta en valor" de las murallas de la Ciudad Alta entra en los PGE con una aportación estatal de más de dos millones hasta 2017. El Centro Oceanográfico atrae 3,4 millones para mejorar las instalaciones del muelle de As Ánimas. Las nuevas apuestas inversoras del Gobierno autonómico se desconocen todavía.

Pero hay otros proyectos de financiación estatal y autonómica que presentan más dificultades de ejecución o que no cuentan con la prioridad de los respectivos gobiernos y se quedarán fuera del próximo calendario preelectoral.

El Estado posterga sine díe la conexión ferroviaria con la dársena de Langosteira, aunque impulsa el enlace viario; hace visible su apuesta por la intermodal pero sin definir actuaciones y con una cantidad mínima; e ignora la creación de una red ferroviaria de cercanías y la inversión específica en el saneamiento de la ría de O Burgo, reclamado por mariscadores y partidos.

A la espera de corroborar partidas ya previstas o conocer alguna para proyectos nuevos, la Xunta ha aplazado al próximo curso el final de la ampliación del CEIP Emilia Pardo Bazán y descarta la reforma del instituto Eusebio da Guarda; podría reducirse, como ya ocurrió el año pasado, la financiación de la urbanización del parque ofimático; también se espera que continúe diluido en el desinterés el eterno plan del metro ligero metropolitano.