Cuatro imputados se sentarán mañana en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de A Coruña para responder por un delito de establecimiento de depósito de residuos tóxicos sin autorización y de otro contra el medio ambiente. La Fiscalía demanda que cada uno de ellos sea condenado a cuatro años y tres meses de cárcel, pues los responsabiliza de verter los materiales en dos montes y un regato de Carballo. La acusación pública relata en su escrito de calificación que uno de los imputados almacenaba bidones con residuos de pinturas, colas, pegamentos y esmaltes "de muy variado tipo y de alta toxicidad" sin contar con autorización ni informar a la Xunta.

Las sustancias, que carecían de "control y prevención que limitase su riesgo" eran utilizadas en la construcción. En enero de 2011 el propietario de los bidones le encomendó a dos de los acusados, que son hermanos, que se deshiciesen de parte de ellos abandonándolos en un monte situado en el exterior del Punto Limpio de Carballo. Los materiales provocaron un vertido en la zona.

La Fiscalía sostiene en su escrito de calificación que unos días después encomendó al cuarto procesado que eliminase parte del material. El imputado transportó los residuos en un vehículo y los arrojó en las cercanías de un regato y en un monte. "Los vertidos, en su mayoría, volcaron entrando en contacto con el terreno", subraya el representante del Ministerio público, al tiempo que destaca que provocaron "acumulaciones de colorantes y esmaltes sin tratamiento y, con ello, la contaminación de suelos y la afectación temporal de diversas zonas de Carballo con materiales pesados como el Cobalto, Cadmio, Mercurio, Benceno, Tolueno, lejías y otros compuestos nitrogenados".

Las sustancias, que fueron detectadas "en elevadas concentraciones" en los días posteriores a los vertidos, ocasionaron "sin ninguna duda" daños en el ecosistema de la zona, según recalca el fiscal, quien advierte de que "en caso de ingesta de aguas contaminadas podrían llegar a ser mortales para el hombre".

El Ayuntamiento de Carballo, según especifica el escrito de calificación, se gastó 13.500 euros en la limpieza de las áreas afectadas. Las dos empresas contratadas por el Concello recogieron y destruyeron 50 envases contaminados de distinto tamaño (4.200 kg.) y tierras contaminadas. Las compañías también realizaron análisis periódicos de la pureza del agua y la tierra en los puntos de los vertidos. La Fiscalía, además de una condena de cuatro años y tres meses de prisión, reclama a la Audiencia de A Coruña que les imponga una multa de 7.200 euros a cada uno y el abono de una indemnización conjunta al Concello de Carballo de 14.000 euros.