El Mallorca no se plantea, de momento, sacar a subasta las acciones de Deporhostelería, la sociedad que gestiona la concesión del Playa Club. El club balear puede subastarlas e incluso llegar a adjudicarlas tras el auto judicial del 22 de febrero, notificado a las partes el pasado 17 de marzo, en el que la jueza Estefanía Cambón, magistrada del Juzgado de Primera Instancia Número 2 de A Coruña, concede al Mallorca todas sus peticiones de embargo para cobrar 470.000 euros, parte de la cantidad que todavía le adeuda el Deportivo por el fichaje de Albert Luque en 2002. En total, los pagarés pendientes suman 1.080.000 euros, pero son 470.000 los que ya están embargados tal y como dicta un auto contra el que ya no cabe recurso.

La voluntad del Mallorca, que se encuentra en una situación preconcursal, es cobrar ese dinero de inmediato, si bien de momento no subastará las acciones de la sociedad que gestiona la concesión del Playa Club. Fuentes del club insular aseguraron ayer que su aspiración es cobrar ese dinero pendiente del Dépor sin llegar al extremo de tener que subastar las acciones de Deporhostelería.

Taquillas

La juez también ha decretado el embargo de las taquillas de los partidos oficiales que el equipo coruñés dispute en Riazor, que era otra de las pretensiones del Mallorca para garantizar sus cobros. Ese embargo todavía no se hará efectivo en el encuentro del próximo domingo contra el Getafe, ya que hasta la primera semana de abril no se nombrará al administrador judicial cuya misión será vigilar que ese dinero que entre por taquilla se destine a satisfacer la deuda pendiente con el club balear. El Deportivo propondrá a un candidato para que sea el administrador y el Mallorca presentará otro, por lo que será la jueza la que dictamine quién se encargará de cumplir con esa función.

Fuentes mallorquinistas insisten en que la obligación del club, en pleno proceso preconcursal, es reclamar sus derechos de cobro hasta las últimas consecuencias, aunque no pretende causar ningún daño deportivo al equipo coruñés. Por eso no ha puesto en caso en manos de la UEFA, lo que podría impedir la obtención de la licencia UEFA para disputar una competición continental en caso de que el Dépor se clasifique para Europa.

En cambio, el Mallorca sí presionó por la vía deportiva el pasado mes de enero, cuando bloqueó la inscripción de futbolistas por parte del Deportivo ante la Liga de Fútbol Profesional. El equipo coruñés intentó reforzarse en el mercado invernal con un lateral izquierdo para cubrir la baja de Filipe Luis, pero finalmente no llegó a concretar ninguna operación, en parte porque el Mallorca se lo impedía.