El juego coral del equipo y la genialidad del solista Leo Messi. Con eso se bastó el Barcelona para golear al Racing de Santander, aumentar a 21 el número de tantos a favor en casa en cuatro partidos y continuar al frente de la clasificación liguera.

Y todo ello en un partido después del parón de selecciones y con el temido virus FIFA en la cabeza de los aficionados y en las piernas de los futbolistas. Messi anotó dos tantos y ya suma diez en el campeonato el día que regresó Andrés Iniesta, después de un mes de baja a causa de una lesión muscular.

Diez minutos y aún no había aparecido. Es más, en ese tiempo su equipo había estado desaparecido. El Racing, contra todo pronóstico, hasta se había acercado más a la meta de Valdés que el Barça a la de Toño y para colmo de males, Gerard Piqué, lesionado, ya había tenido que ser sustituido por el francés Eric Abidal.

Prácticamente en su primera intervención, en su primera conexión con Iniesta, Leo Messi levantó al público del Camp Nou y marcó un gol de bandera. Ante una nube de defensas, el argentino buscó a Andrés, Iniesta encontró a Messi, Leo se coló entre dos defensas, con una finta sentó a Toño y marcó a puerta vacía.

Messi, tras una jugada con Villa, pudo marcar el 2-0 dos minutos más tarde. Sin embargo, el escenario apenas varió. El Racing seguía parapetado, fiel al planteamiento defensivo de Héctor Cúper, y al Barçelona no se le veía muy fino, más allá de cuando decidía apurar las acciones.

Así ocurrió en el minuto 28. Pedro progresó por la banda izquierda y Xavi, sin marca, remató de cabeza desde el área pequeña. El 2-0 ya fue una losa para los cántabros. El Barça empezó a sentirse más cómodo y empezaron a llegar más ocasiones para los de Guardiola.

La inercia del fútbol del Barça apuntaba a goleada en la segunda mitad, pero el equipo de Guardiola decidió no apurar más sus opciones, a pesar de contar con unas cuentas ocasiones para ello.

Messi volvió a liderar el ataque e incluso reclamó un penalti que aprecio claro en el minuto 67. Sin embargo, la jugada del segundo tiempo fue un espectacular regate de Iniesta que precedió el 3-0.

El manchego elevó el balón ante un defensa y remató al palo, el rechace lo aprovechó el argentino. Messi lleva diez goles en Liga en una racha sin fin.

Entraron Keita y Adriano por Iniesta y Pedro. El Racing, que había aguantado como pudo el embate del Barça, intentó jugar más en el campo azulgrana en el último cuarto de hora, pero sin ninguna fe.

Los azulgrana, en alguna contra, pudieron incrementar su cuenta, especialmente Messi, Villa e incluso Abidal. El 3-0 prolonga la racha de goleadas del Barça en casa, que desde que ha empezado la Liga ha derrotado consecutivamente en el Camp Nou al Villarreal, Osasuna , Atlético y Racing.