Alemania fue la ganadora de la Copa del Mundo de esgrima, que se disputó durante el fin de semana en A Coruña, en la modalidad por equipos. El conjunto germano, que se mostró implacable en la final para vencer a Francia, dio la sorpresa, ya que el favorito para el título era Italia, que presentó un conjunto integrado por los cuatro primeros del ranking mundial, pero que cayó en las eliminatorias ante Estados Unidos. Casi veinte equipos lucharon por el oro -en total fueron 19 selecciones-, y entre ellas también estaba el equipo español, con Delbergue, Lacasta, Desperon y Llavador, que no pudo pasar de primera ronda al perder contra Egipto por un apretado 45-43.
La jornada estuvo marcada por la eliminación de la Italia de Andrea Cassara, vencedor el sábado de la prueba individual y número uno del ranking mundial, ante el jovencísimo equipo de Estados Unidos. Los transalpinos, conscientes de su superioridad, entraron al asalto demasiado confiados y lo acabaron pagando muy caro. Imoden, número ocho de la lista mundial, Chambley-Watson, Massialas y Meinhardt les derrotaron por un ajustado 45-43.
En la semifinales, Estados Unidos se topó con Alemania. Los teutones, conscientes de su oportunidad por la ausencia de Italia, hicieron valer la rapidez y veteranía del conjunto formando por Kleibrink, Wessels, Joppich y Bachmann para imponerse con autoridad por 45 tocados a 34.
Por el otro lado del cuadro, Francia y Corea se midieron en la otra semifinal con triunfo para los galos, toda una lección de Le Pechoux, Cuyart, Marcillaux y Sintes, que vencieron por 45-21. Corea y Estados Unidos lucharon por el bronce en un asalto muy igualado. Se llegó al empate a 42, pero entonces la selección formada por el número siete mundial, Choi, y por Heo, Jeong y Kwon dio un apretón final para subirse al cajón (45-43).
En la final, Alemania mandó desde el primer momento y fue aumentando las distancias en cada relevo. Llegaron así al último con ventaja para Joppich de 40-21 contra Le Pechaux, y aunque el segundo clasificado en individual comenzó una remontada, no fue suficiente y el marcador final quedó en 45-32 para los germanos.
