Un ave fénix que renace de sus cenizas. Así es Martín Varela (Corme, 1978). El tenista, aliado a una silla de ruedas desde que sufrió un accidente a los veinte años, puede presumir de esa sorprendente capacidad de superación que le acompaña día tras día a pesar de las adversidades, sobre todo económicas. Varela, número uno del ranking nacional de tenis sobre silla de ruedas, ya tiene el billete para la Copa del Mundo que se disputará en Turquía el próximo 20 de mayo. Y es que su lista de retos no deja de engordar. Por ello, los vecinos de Corme celebrarán este jueves una fiesta para recaudar fondos con el objetivo de que esta aventura no tenga fin.

El nuevo curso de 2013 arrancó de la manera más positiva posible. Martín Varela, con el premio al mérito deportivo otorgado por la Federación Gallega bajo el brazo y la ilusión de un auténtico luchador, se hizo con el título del VII Open de Marbella. Además, el seleccionador nacional David Sanz contó con el coruñés para una concentración. La sonrisa del cormelán parecía imborrable. Sin embargo, hace apenas un mes, Varela se vio sumido en una crisis existencial: sin apoyos económicos, su carrera deportiva tendría que hacerse un hueco en el baúl de los recuerdos. Fue entonces cuando Corme se volcó de lleno con su deportista.

La verbena de este jueves, que se celebrará en la explanada del muelle del pueblo, contará con tres grupos -Cinema, Nueva Generación y Galilea- y dos disc-jockey que animarán la jornada a todos los asistentes. Los fondos recaudados en el bar serán entregados al tenista para que pueda continuar entrenando y participando en diversos torneos. "Los vecinos de Corme y alrededores son los únicos que me ayudan, mi único patrocinio. Es bastante triste que solo sean ellos pero estoy muy orgulloso", aclara un Martín Varela agradecido con los suyos.

El tenista gallego ya está más que recuperado de la derrota vivida en casa, en el Open Internacional Ciudad de A Coruña, ante el británico David Phillipson. "Es un auténtico profesional. Yo no puedo hacer eso, dedicarme solo al deporte. Tengo que compaginarlo con un trabajo", se explica. A día de hoy, Martín Varela se entrena en Barcelona junto a la selección de Argentina para ponerse a punto para el título mundial que se juega en la localidad turca de Antalya. "Voy a darlo todo, aunque ya es un honor estar preparándome con estos tenistas", dice.

A Varela le gustaría seguir soñando, pero la crisis económica y la falta de apoyos no le permiten pensar en un futuro: "Mi carrera depende del dinero que se recaude en la fiesta. Quiero poder entrenar todo el día y acudir a torneos, pero sé que es difícil".