La ilusión puede ser tan poderosa como el talento, por eso el Obradoiro se aferra tanto a ella. Anfitrión de la Copa del Rey que arranca el jueves en A Coruña, el conjunto santiagués dio ayer el primer paso con su visita a La Estrella Galicia de Cuatro Caminos y su posterior entrenamiento en el Coliseum, escenario de la competición.

"Vamos a disfrutar sin olvidar nuestras obligaciones", anunció Moncho Fernández. El técnico entró en la conocida cervecería con una sonrisa. "Es un sitio especial para mí", dijo, y aclaró: "Aquí firmé mi renovación". Su objetivo desde entonces sigue siendo el mismo, liderar a un Obradoiro que no se encuentra en su mejor momento. El entrenador aseguró que ha llegado el momento de cambiar el chip. "Sin duda llevamos una mala racha -seis jornadas sin ganar- pero tenemos ganas de dar la campanada", anunció.

El rival es un Laboral Kutxa al que conoce bien, pues se citaron el pasado fin de semana en Santiago con victoria vasca. Moncho Fernández no se atreve a decir si este dato "beneficia o no". "Es como tocó", agregó. "Sabemos contra quién jugamos y vamos a trabajar para mejorar muchas de las cosas que hicimos el sábado". Además, destacó que su grupo fue capaz de hacer frente al Baskonia "durante 25 minutos".

Técnico y jugadores creen que en la Copa del Rey puede pasar de todo, y el Obradoiro tiene muchas papeletas por ser el equipo de casa. "Cada partido es diferente, somos conscientes de la dificultad pero la ilusión es nuestro arma". Es por eso que prefiere no hablar de favoritos, aunque sabe que los cuatro primeros clasificados de la ACB -Valencia, Barcelona, Madrid y Laboral Kutxa- son muy peligrosos "por sus resultados y plantillas". "Todos llegan a la Copa por méritos propios pero cualquiera puede derrotar a cualquiera porque es una competición muy abierta", argumentó.

Tanto Moncho como José Luis Mateo, director general del club santiagués, esperan que la competición sea "inolvidable para los gallegos", quienes ya pueden disfrutar de la Estrella Galicia con el nuevo etiquetado que luce el hashtagh #copadoiro. "Esperemos que esto sea una consolidación de nuestro proyecto", agregó Mateo.

El entrenador del Obradoiro, además, dedicó unas palabras a la afición a la que se dirigió directamente diciendo: "Pasadlo bien para que podáis contarlo en un futuro, que podáis decir 'yo estuve aquí, en una Copa tan importante'". Un llamamiento que refleja la motivación de su grupo. "Nosotros vamos a pelear y haremos que nuestros aficionados se sientan orgullosos", avisó. Según Moncho Fernández, serán "cuatro días magníficos".

Una vez finalizado el discurso previo a la Copa del Rey, llegó el turno de divertirse. Artem Pustovyi, Juanjo Triguero, Jesús Chagoyen, Santi Yusta y Adam Waczynski participaron en un concurso de servir cervezas, en el que destacó el buen rollo entre los jugadores. El resto de la plantilla, distribuido por las mesas del local, y un jurado decidieron que el mejor tirador de cañas era el capitán Chagoyen. Se subió a la báscula para conocer el número de litros de cerveza que podrá disfrutar cuando finalice la temporada: más de 100. De momento, él y sus compañeros buscan el premio de pasar a semifinales.