El Villarreal goleó al Celta, en un partido que acabó siendo mucho más fácil de lo que se esperaba, viendo cómo llegaba el equipo gallego a este partido. Pero los amarillos mantienen su tendencia al alza, y comienzan a ser un equipo fuerte en el Madrigal, donde además de ganar, golean con facilidad.

Los de Escribá acertaron con sus primeras llegadas al área y, a partir de ahí, supieron controlar el partido para acabar goleando a un Celta que acabó desesperado. Un gran Roberto Soriano por dos veces, Bakambu, Wass en propia puerta y Trigueros, certificaron el cinco a cero.

La primera parte fue eléctrica para el Villarreal, que vio cómo sus dos primeros disparos a puerta fueron gol. Y además los dos del mismo jugador, el italiano Roberto Soriano que, al cuarto de hora, se había coronado de amarillo. Lo hizo a los ocho minutos, cuando buscó a la espalda de la defensa un gran pase de Trigueros y remató con clase y a la media vuelta.

Tres minutos después, una mala salida de balón y un pase de Sergio Álvaréz al mismo Soriano, fue aprovechado por el italiano, que viéndolo fuera de portería, le superó con un toque suave .

Un gol que ponía el partido de cara para los locales, que fueron capaces de aprovechar sus primeras opciones y pudieron ser más.

Pero, tras veinte minutos de dominio claro, el equipo amarillo bajó su nivel de presión y permitió al equipo de Berizzo tener más balón y llevarlo al área, pero sin llegar a generar peligro de verdad. Tal fue así, que a los tres minutos de la reanudación el partido se acabó.