Fernando Alonso cree que este fin de semana no se repetirán los "problemas" sufridos durante la segunda sesión de entrenamientos libres del Gran Premio de Brasil, que ayer le obligaron a dejar prematuramente la tanda con sólo 18 vueltas completadas.

El bicampeón mundial (2005-2006) tuvo problemas con la presión del agua del sistema de recuperación de energía cinética (ERS) de su monoplaza y McLaren le pidió bajar del vehículo antes de finalizar la sesión.

"Estaba previsto cambiar todo el motor, este es el que utilizamos los viernes -en alusión a ayer-. Mañana -hoy- usaremos el de carrera, también el ERS es el de carrera y no tendría por qué haber problemas", puntualizó el asturiano.

Si hace un año Alonso fue protagonista en Interlagos al ser fotografiado tomando el sol en una hamaca en plena sesión de libres, esta vez se puso a los mandos de una cámara de televisión para matar el tiempo mientras acababa la jornada de pruebas. "Me dijeron 'vamos a emitir lo que grabas'. El mando de juego es sensible, visteis el cielo, el asfalto, todo menos a (Sergio) Pérez", bromeó el asturiano.

El piloto de Mclaren aseguró que la escudería fue "más competitiva" que otros años y confía en que la lluvia les ayude. "Cuando llueve todo puede cambiar y no tenemos nada que perder. Así que si llueve, mejor", señaló.