La era Gaizka Garitano terminó hace casi un mes, aunque su figura todavía planea sobre Abegondo, al menos para algunos futbolistas como Joselu Mato, quien ayer cargó contra el anterior técnico del Deportivo. "El futbolista lo que quiere es jugar, confianza y minutos. Con el otro entrenador no tuve esa confianza ni esos minutos. Fue una etapa bastante mala en ese aspecto. Cuando llegué me vendió las cosas de una manera y después ves que eso no es verdad. Con él nunca tuve una conversación bastante cordial. Entrenaba bien y no tuve ese premio de consolidarme en el Deportivo", explicó el de Silleda, muy crítico con la forma de actuar del vasco: "En el periodo de la lesión sí se acercaba a hablar conmigo de otra manera que no se reflejó para nada cuando volví. Después del partido que hice en el Bernabéu pensé que las cosas iban a ser diferentes y no cambiaron para nada. Los números están ahí y soy uno de los que menos ha participado. Eso quiere decir algo".

Con Pepe Mel empieza a disfrutar de cierta continuidad por primera vez en la temporada. Fue titular frente al Barcelona y repitió de inicio ante el Celta. Por eso Joselu se siente "feliz" y con muchas ganas de seguir haciendo méritos para "continuar con esa confianza". "He venido a eso. Un jugador no puede estar contento sin tener esa confianza. Hubo muchos periodos de la etapa de Garitano que no comparto con él en ese aspecto. Ahora estoy en un tramo bueno y feliz porque estoy aportando cosas al equipo. Con el cambio de entrenador estas dos últimas jornadas he estado jugando y esperemos que con el trabajo de la semana pueda continuar con esa confianza", afirmó.

Pasa página tras la derrota del pasado fin de semana contra el Celta, el equipo en el que se formó y le dio la oportunidad de convertirse en futbolista profesional. Para él resultó "extraño" enfrentarse a tantos excompañeros de su etapa celeste, pero ahora se debe al Dépor: "El Celta fue donde me crié, le debo muchas cosas y ahora juego en el Deportivo, defiendo al Deportivo, pero tampoco puedo cambiar mi pasado y no lo cambiaría nunca". El ariete mira al futuro con optimismo y no le da ninguna importancia a los silbidos y cánticos ofensivos que le dedicó la afición viguesa desplazada a Riazor. Prefiere centrarse en las "diez finales" que quedan por delante: "Tenemos que trabajar como lo venimos haciendo, pensar en el Valencia, intentar no perder muchos puntos fuera y sobre todo en casa intentar ganar todo lo que nos queda".

Andone no jugó contra el Barça al estar sancionado y luego Pepe Mel decidió dejarlo en el banquillo frente al Celta para dar continuidad a Joselu. El rumano lleva ocho goles en Liga, y el gallego, tres, los dos que firmó en el Bernabéu, más el que le endosó al Barcelona en el último triunfo en Riazor. Ambos puntas pueden jugar juntos a la vez, aunque el de Silleda prefiere no referirse a esa posibilidad porque "son decisiones que tiene que tomar el entrenador". "Yo ya no entro en ese aspecto. Tanto él como yo entrenamos para jugar el fin de semana y luego el técnico es el que decide -recalca-. Somos dos jugadores que aportamos cosas al Deportivo y lo que queremos ambos es ayudar al máximo".