El Ministerio de Fomento clarificó ayer el uso que hará de la red interior del AVE en Galicia hasta, por lo menos, el momento en que se concluya la conexión con Madrid, que será a finales de 2015. Hasta entonces, todo el Eje Atlántico y la línea Santiago-Ourense se utilizarán en ancho ibérico para permitir la conexión con los puertos de la fachada atlántica y el transporte de mercancías por las nuevas vías, tanto para el comercio con el resto de España como con Portugal.

La decisión supondrá además el prescindir de los cambiadores de ancho de vía en Santiago y en Ourense, lo que aportará la ventaja de que los trenes de viajeros que recorran esta línea podrán incorporarse al Eje Atlántico, tanto para ir a A Coruña como Vigo, sin pérdidas de tiempo derivadas del cambio de ancho de los ejes de los vagones.

Este planteamiento no acarreará inversiones adicionales ni cambios en las infraestructuras, ya que la red del AVE gallega utiliza traviesas polivalentes que tanto sirven para colocar los raíles en ancho internacional -usado por los trenes más veloces- como en ancho ibérico. Basta con levantar, en un operación sencilla y rápida, un raíl y amarrarlo en la muesca específica.

La planificación fue adelantada ayer por el director general de Infraestructuras Ferroviarias de Fomento, Carlos María Juárez, en una jornada sobre el AVE organizada por el Colegio de Ingenieros de Caminos de Galicia. Hasta ahora, Fomento no había dicho claramente como iba a encajar el transporte de mercancías y el viajeros en las líneas de alta velocidad. Circularon varias opciones, pero ninguna con rango oficial. Y ayer Carlos Juárez lo anunció claramente.

Toda la red interior del AVE funcionará en ancho ibérico, lo que permite compatibilizar las mercancías y los pasajeros. Así, al Eje Atlántico, -que se construye en ancho ibérico y ya está operativo totalmente el tramo entre Santiago y A Coruña- tendrán acceso todos los puertos, con lo que podrán colocar todas sus mercancías, tanto las destinadas al resto de España como a Portugal, que utiliza el mismo ancho de vía. El transporte de mercancías es el principal déficit del sistema ferroviario.

Y también usará el ancho ibérico la línea Santiago-Ourense, que está diseñada exclusivamente para viajeros. Inicialmente este corredor sería en ancho internacional, pero eso obligaría a colocar cambiadores de vía en las dos ciudades para permitir la circulación de los trenes y el pasado de un ancho de vía de a otro.

La última decisión de Fomento elimina los cambiadores y además le permite al Gobierno abrir, como está previsto, la primera línea de alta velocidad de Galicia, entre Ourense y A Coruña. "No tiene sentido perder diez minutos de tiempo cambiando el ancho de los ejes de los trenes cuando todo el trayecto se puede hacer en ancho ibérico", argumentó Carlos Juárez.

Este tramo será el primero que utilicen los trenes híbridos, de propulsión eléctrica y diésel y eje variable, capaces de circular a 250 kilómetros por hora. Aprovecharán la línea de alta velocidad entre Madrid y Olmedo, allí pasarán a ancho ibérico y circularán por la vía actual hasta Ourense, donde se incorporara a la línea de alta velocidad.

El uso de ancho ibérico en el interior de Galicia será durante "varios años", probablemente hasta que se concluya la conexión con Madrid, momento en el que toda la red pasará a ancho internacional, que permite mayores velocidades, pero Juárez evitó poner un plazo. Tan solo advirtió que esa es la "tendencia" del sistema ferroviario.

Para los ingenieros, la decisión de Fomento es "lógica" y consideran que esto permitirá, sobre el año 2017, recuperar la vía actual para el tráfico de mercancías y hasta para crear un servicio de cercanías.

El director general de Fomento sostuvo que el AVE gallego será de mayores prestaciones que el de Barcelona o Valencia e insistió en que continúan con la línea Vigo-Ourense y que en los próximos meses se licitarán las obras que quedan pendientes del tramos entre Ourense y Lubián, la salida hacia Madrid.