El abogado del colectivo de farmacéuticos supuestamente estafados por el empresario lucense imputado en la 'Operación Campeón', Jorge Dorribo, Vicente Tovar, ha asegurado este jueves que el acusado "alardeaba" con las farmacias de tener contactos y les hacía creer que iban a tener "subvenciones".

En abril de este año, Dorribo solicitó a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) un permiso para la distribución de determinados medicamentos que, sin embargo, fue denegado porque no reunía las condiciones y requisitos técnicos estipulados por este organismo.

"Siempre iba dando esa apariencia de legalidad ante los farmacéuticos y de que todo iba muy bien y alardeaba de contactos. Les hacía ver que no había problemas y que iba a tener subvenciones que, finalmente, parece que eran mentira", ha recalcado Tovar en una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press.

El abogado ha recordado que "presuntamente" Dorribo pedía a las farmacias que compraran más medicamentos de los que necesitaba para, posteriormente, exportarlos de manera "ilegal" y que poseía, además, tres empresas: Tramipharma, los Laboratorios Asociados Nupel e Innova Farmacéutica del Norte que era la encargada de la distribución. Con estas dos últimas, ha comentado, el empresario se dedicaba, "presuntamente", a la exportación ilegal.

"Compraba las farmacias, ponía los locales y buscaba farmacéuticos que pusieran el título y entre ellos se articulaba con un contrato de cuentas en participación. El ponía el dinero para comprar las farmacias y luego tenía un pequeño sueldo", ha explicado Tovar para subrayar que "les hacía comprar más cantidad de medicamentos de la que necesitan con la excusa de que eran para ONG, flotas pesqueras o asilos para ancianos".

El excedente, ha proseguido, se lo enviaban a Dorribo quien, supuestamente, se dedicaba a la exportación ilegal y no pagaban a los proveedores. "Tenían un contrato por el cual Dorribo podía hacerse cargo del pago de estas medicinas que compraban a los laboratorios y a las distribuidoras", ha recalcado.

Así, el impago del empresario a los farmacéuticos ha provocado que el colectivo tenga, en estos momentos, una deuda elevada con los laboratorios a los que les pedían las medicinas.