Cruzar el Padornelo no ha puesto freno al argumentario de la Generalit sobre el agravio constante por parte del Gobierno central. El discurso se mantuvo, solo cambió el escenario. A más de uno seguro que se le atragantaron las palabras del conseller de Presidencia de la Generalitat, Francesc Homs, durante el desayuno informativo que protagonizó ayer en el Fórum Europa. Tribuna Galicia, en Santiago. Homs mantuvo su tesis de que debería paralizarse la construcción de una línea ferroviaria de alta velocidad que comunique Galicia con Madrid porque, argumentó, en época de crisis y de escasez de recursos, "hay que priorizar". Una crisis que ha obligado a Cataluña a solicitar al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), nutrido con fondos de todas las comunidades, miles de millones de euros para que la Generalitat pueda hacer frente a sus pagar sus facturas. Según Homs, en una situación económica como la actual, las inversiones deben decidirse en base a "un criterio de rentabilidad".

Tras puntualizar que "no se trata de un ataque a nadie", sino de "una reflexión" sobre la necesidad de "priorizar", el número dos de Artur Mas y baluarte del soberanismo en la Generalitat señaló que el Ejecutivo catalán ha paralizado "todas" sus obras, como la conexión por metro del aeropuerto de Barcelona. "Nosotros priorizamos el gasto social, pero esto no se cuenta", expuso durante el coloquio.

A su conferencia acudió el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, acompañado por el conselleiro de Economía e Industria, Francisco Conde, aunque no se quedaron al coloquio por coincidir con la habitual reunión de los jueves del Gobierno autonómico.

La escalada de ataques contra el AVE gallego empezó hace ya tres años cuando CiU mostró en el Congreso sus "reticencias" ante "ciertos proyectos multimillonarios que no llevan a ninguna parte". Desde entonces se sucedieron distintas críticas, tanto desde la Generalitat como incluso desde el Ayuntamiento de Barcelona -ambos en manos de CiU-. Incluso en Europa, los nacionalistas catalanes cargaron contra el AVE gallego por considerar excesiva y carente de viabilidad la inversión en esta infraestructura.

A esos ataques se sumaron también dirigentes de ERC e incluso los presidentes de otras comunidades autónomas, como la de Castilla-La Mancha, Dolores de Cospedal, o de Extremadura, José Antonio Monago; si bien la número dos del PP terminó matizando sus discrepancias con el AVE gallego advirtiendo de que le fueron atribuidas por error.

Aprovechando su presencia en Galicia, Homs avanzó que "en próximos días" Convergència formalizará su preacuerdo con Compromiso x Galicia, PNV y Coalición Canaria para concurrir en alianza a las elecciones europeas del próximo mes de mayo.

El político catalán inició su intervención señalando que no había viajado a Galicia para "pedir apoyo" en lo referido a la consulta sobre la independencia, sino para "contar lo que pasa en Cataluña", que "a veces, se explica de forma insuficiente".

Los socios gallegos de CiU en las elecciones europeas del próximo mes de mayo tuvieron ocasión de hablar largo y tendido con el conseller de Presidencia catalán. Durante dos horas, los dirigentes de Compromiso por Galicia Rafael Cuíña y Xoán Antón Pérez Lema compartieron impresiones con Francesc Homs e incluso le preguntaron por la "teima" con el AVE gallego. "Fríamente entiendo el planteamiento que hace, pero no lo comparto", reconoció en declaraciones a este periódico Cuíña. El argumento aducido por CiU para cargar contra la alta velocidad gallega es que hay "otras obras prioritarias" como el impulso del Eje Atlántico o el tren de cercanías, según detalló el dirigente de Compromiso por Galicia. "No es un ataque a Galicia, si fuera en Valencia el argumento sería el mismo", expuso Cuíña.

Pese a que su formación "entiende" el discurso de CiU -"en época de crisis, no deben hacerse inversiones desorbitadas y se debe priorizar"- "no comparte la teima" con el AVE gallego. "Galicia estuvo marginada durante muchos años, cuanta inversión venga para aquí será apoyada", defiende el dirigente de Compromiso.