Un quinto camión cisterna estuvo a punto de ser calcinado tras una nueva tentativa de incendio en la porivnica de Lugo, en esta ocasión en la localidad de Castro de Rei. El vehículo es de un autónomo que trabaja para la empresa Reny Picot. Las llamas afectaron a las cuatro ruedas y a la cisterna, que estaba vacía. En el lugar fueron descubiertas varias garrafas y el camión apareció con la pintada: Leite Polvo.

La semana pasada tuvieron lugar varios incidentes en los que se vieron incendidados un total de cuatro camiones, un de ellos el jueves en A Pastoriza, y otros tres el viernes, en la planta de Logística Almentaria, antiguas instalaciones de Pascual, en Outeiro de Rei. Los sabotajes se produjeron en el marco de una semana de movilizaciones del sector lácteo gallego contra la la entrada de leche foránea en factorías de tratamiento.

Los ganaderos continuarán con la campaña de "vigilancia" que iniciaron la semana pasada para controlar la entrada en Galicia de leche foránea, con la intención de "denunciar la doble moral de la industria" y, en concreto, las prácticas de "alguna empresa", que "por la mañana dice que le sobra leche y por la tarde importa grandes cantidades". El portavoz de Unións Agrarias en la Plataforma en Defensa do Sector Lácteo, Óscar Pose, reconoció que la semana pasada "no hubo movimientos de leche foránea" por parte de las empresas asentadas en Galicia, entre otras cosas porque los propios sindicatos habían anunciado la presencia de esos controles en las carreteras y, probablemente, optaron "por desviarla hacia otras zonas" para evitar problemas.

En caso de que los ganaderos detecten la llegada de camiones con leche foránea, han pensado pedirles a los conductores las acreditaciones de origen y de destino "que tienen la obligación de llevar" e "informar a las fuerzas del orden".