Unas 36.000 toneladas de neumáticos para reciclar en Galicia. Esa es la cantidad que la Xunta reconoce en el concurso que acaba de sacar para la gestión de las ruedas abandonadas y cuyo coste estima en 2,7 millones. En la actualidad, en la comunidad hay tres grandes vertederos de neumáticos. El de A Laracha ronda las 35.000 toneladas, una tercera parte que el de Seseña. El de Fene acumula 1.000 toneladas y el de As Somozas, 100.

La asociación ecologista Adega denuncia que estas 36.000 toneladas tienen como destino "el olvido o la incineración". La asociación reconoce que la gestión de los neumáticos usados en Galicia "es muy deficiente" y que apenas existen instalaciones dedicadas a su reutilización o reciclaje.

El vertedero de Fene tenía como destino el recauchutado por parte de la empresa Rubber Industrias del Caucho, pero quebró en 2000. En As Somozas, en las instalaciones de Sogarisa, las 100 toneladas estaban previstas que se destinasen como combustible para cementeras, o empresas de cerámica y siderurgia. Mientras que las 35.000 de A Laracha servirán también como combustible para una empresa de cerámica. Adega critica que el tratamiento de estos residuos pase, en su mayor parte, por la incineración.