Diferencias de precios entre lo que perciben los ganaderos por la venta de la leche por parte de la industria y el que pagan los consumidores, la ausencia de contratos de larga duración, impagos? Son algunas denuncias hechas por los productores para alertar de la situación de crisis que vive el lácteo gallego. Parte de esas quejas llegan a la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), que en el caso de Galicia atendió 21 casos de ventas a pérdidas entre 2014 y 2016, la cifra de denuncias más alta de toda España en ese periodo.

Este organismo que depende del Ministerio de Agricultura realizó 300 inspecciones en los dos últimos años en la comunidad gallega en varios sectores de la cadena alimentaria y de ellas, unas 113 -el 37%- derivaron en sanción. Esta cifra coloca a Galicia como la segunda autonomía más infractora. Solo la supera Cantabria, comunidad en la que casi ocho de cada diez controles derivaron en multas. Aunque el volumen es mucho más bajo que en el caso de la comunidad gallega: 16 sanciones de un total de 21 controles. La otra cara de la moneda son Navarra y Canarias, donde la AICA practicó 26 y 18 inspecciones en el sector agrario respectivamente, pero que se saldaron sin ninguna sanción en ambos casos.

El peso del lácteo en Galicia -con el 40% de toda la producción de leche de España y más de la mitad de los ganaderos con entregas a la industria- explica que el 70% de las 430 inspecciones que los técnicos del Ministerio de Agricultura realizaron en el sector en toda España desde 2014 se han practicado en la comunidad gallega. En Andalucía, los controles del Gobierno central el año pasado se centraron en el sector del aceite de oliva, al acaparar el 42% de las 295 visitas registradas a nivel nacional en este ámbito. La comunidad andaluza concentró la cuarta parte de las 402 inspecciones en la geografía española en negocios y explotaciones vinculadas a la producción y comercialización de frutas y hortalizas. En el caso de Castilla-La Mancha, destaca el sector vitivinícola y precisamente por eso solo en esta autonomía se realizaron 245 inspecciones, el 43%.

En cuanto a las sanciones, Galicia, con 113 multas, concentra un tercio de las aplicadas en el territorio nacional desde 2014. A bastante distancia le siguen Extremadura y Madrid con 51 y 40 expedientes sancionadores.

Datos estatales

A nivel estatal, solo durante el año pasado el Gobierno central impuso 56 multas, de las que el 92% se aplicaron al lácteo y las cuatro restantes se repartieron entre el sector del aceite y el vino. Respecto a hace tres años, el lácteo junto con el ámbito de las frutas y hortalizas son los que acumulan más expedientes, con 148 y 178. El incumplimiento de los plazos de pago es la causa más frecuente de las infracciones con un 62% de los expedientes sancionadores impuestos por la AICA. También es frecuente la ausencia de contratos, que representa la cuarta parte del total.

De las 1.748 inspecciones de oficio llevadas a cabo por la AICA en España desde 2014, unas 541 corresponden al año pasado. Además de estos programas de control, el organismo recibe denuncias de operadores o de asociaciones por incumplimientos de la Ley de la Cadena Alimentaria.

El año pasado recogió 53 denuncias, 22 de ellas -el 41%- en el lácteo. El resto se repartieron entre 13 relacionadas con empresas de frutas y hortalizas, seis en el ámbito vitivinícola, siete en el de aceite de oliva, dos en las aceitunas, dos en la carne de pollo y uno en atún en conserva. De estas, 17 han sido por venta a pérdidas, práctica prohibida por la Ley de Comercio Minorista y en la que la AICA no tiene competencias, porque pertenece a las autonomías. Desde la creación de la AICA en 2104, se contabilizaron 149 denuncias, 51 de ellas -el 34%- por venta a pérdidas. El sector más denunciado fue el lácteo con la mitad de los casos.