El PP forzará por ley a los presidentes de la diputaciones a rendir cuentas en el Parlamento autonómico de sus presupuestos anuales, novedad que aprobará a través de la Lei de Acompañamento y que es una respuesta a la negativa este año a acudir a la Cámara de los máximos responsables de las instituciones en Pontevedra, Carmela Silva, y Lugo, Darío Campos, ambos del PSdeG, tras alegar la primera la actitud hostil del PP el año pasado. Su homólogo en A Coruña y compañero de partido, Valentín González Formoso, sí acudió.

Los populares revelaron ayer su iniciativa. Mediante el cajón de sastre que supone la Lei de Acompañamento, una batería de cambios legales tramitados de forma rápida junto a los presupuestos, se alterará la Lei de réxime financiero para "asegurar la adecuada toma de conocimiento por el Parlamento de Galicia de los presupuestos de las Diputaciones Provinciales".