El abogado del maquinista del Alvia accidentado hace más de cuatro años en Angrois, Manuel Prieto, aportó al juez que investiga el siniestro, tres actas internas de Adif que evidencian que su departamento de Seguridad supo que no se encargaría a la consultora Ineco la evaluación del riesgo en la curva de A Grandeira, donde el descarrilamiento del tren provocó 80 muertes y dejó a 144 personas heridas.

En un escrito al que ha tenido acceso Europa Press, presentado ayer en el Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago, el letrado que defiende a Francisco Garzón pide la citación como testigo o como investigado del responsable máximo de la Dirección de Instalaciones y Control del Tráfico de Adif, a la que atribuye una "manifiesta e injustificada negligencia". De hecho, indica que este departamento -el encargado de las obras- "impone la no aplicación" de la normativa europea en materia de evaluación de riesgos para el tramo que abarca la curva de Angrois.

Sobre el área de seguridad, a cuyo frente estaba el investigado en la causa Andrés Cortabitarte, critica que, de acuerdo con lo que se extrae de las actas, "es consciente de la necesidad de aplicar las normas Cenelec al enlace de Santiago y que no se ha hecho", pero aún así "emite el certificado de seguridad para la autorización de la puesta en servicio de la línea". El letrado defiende que así el departamento de Cortabitarte estaba "incumpliendo de forma manifiesta las obligaciones normativas en materia de seguridad ferroviaria, de la que es responsable".

Esas actas de reuniones, a las que ha tenido acceso Europa Press, dejan clara la discrepancia entre el área de Seguridad de Adif y su departamento de obras sobre la documentación de seguridad necesaria para dar luz verde al enclavamiento que incluye la curva de A Grandeira. El área de obras entiende que con el decálogo de documentos utilizado habitualmente para la puesta en servicio en red convencional es suficiente, pero Seguridad constata que para el caso de Santiago, un enclavamiento nuevo, deberá presentarse el ISA, es decir, el informe del evaluador externo a cargo de la consultora Ineco.