El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, criticó ayer la actitud sindical por rechazar una subida media "de 1.000 euros al año" cuando hay gallegos que no cobran esta cifra al mes. Además, sugirió que los sindicatos "no representan adecuadamente el sentir de la mayoría" de los trabajadores públicos y rechazó que se incorporen intermediarios al diálogo,

Feijóo esgrimió que "la inmensa mayoría" de los trabajadores públicos, con independencia de la administración en la que trabajen -ya sean autonómicos o desempeñen su labor en ayuntamientos o diputaciones- "firmarían una subida de 1.000 euros al año" que les sitúa "por encima de la media de las comunidades". Feijóo explicó que la última oferta económica que la Xunta dejó sobre la mesa -que supone un incremento de entre 816 y 1.080 euros al año, en función de los distintos cuerpos de funcionarios judiciales- supone "un coste" para los gallegos "de más de 1.000 euros por trabajador" (al incremento habría que sumar los gastos de Seguridad Social, por ejemplo).

"Y no creo que los trabajadores, quienes están en el paro o tienen sueldos similares al salario mínimo interprofesional consideren que 1.000 euros al año es una propuesta ridícula", advirtió el presidente de la Xunta, antes de subrayar que hay quien no cobra esta cifra al mes.