La comisión informativa de Urbanismo de Carballo, en la que están integrados representantes de todos los partidos, técnicos y redactores del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), analizó ayer algunos de los aspectos del documento y se acordó una nueva reunión el próximo 25 de septiembre para que todos los grupos de la oposición puedan presentar sus propias propuestas. Las tres formaciones, Partido Popular, PSOE y Terra Galega, anunciaron que realizarán sus sugerencias para mejorar el documento y subsanar algunos de los errores, aunque de momento no avanzaron cuáles serán porque sostienen que no les dio tiempo a examinarlo detenidamente.
El PP aclaró que tuvo problemas para consultar el planeamiento en formato digital y no pudo hacerlo hasta el pasado jueves, a pesar de que se entregó una copia hace más de dos semanas. Además, la oposición solicitó una copia en papel para compararlo con el anterior plan y ver los cambios que se han introducido.
El más crítico con el documento y la postura del Gobierno local es el portavoz de Terra Galega, Manuel Andrade Cristóbal, que lamenta que no se convocase antes a la oposición para realizar sus aportaciones. Andrade Cristóbal entiende que el PGOM "es el reflejo de las directrices del gobierno", por lo que cree que ahora de poco servirán sus propuestas, sobre todo en relación a las viviendas permitidas, que es el asunto más problemático, aunque espera que se tengan en cuenta.
El planeamiento contempla un total de 26.400 viviendas frente a las 20.000 que proponía la Xunta para los próximos doce años. Andrade Cristóbal insiste en que el Gobierno debería de haber justificado debidamente la necesidad de las nuevas residencias en vez de optar por reducirlas y alerta sobre los problemas que generará el cambio de calificación de los terrenos. "Ahora el Gobierno quiere consenso para resolver una situación que ellos crearon y de la que es el único responsable", destaca el edil independiente.
Los populares también coinciden en parte con el discurso de Terra Galega, aunque creen que el principal problema no es tanto la reducción de viviendas como los lugares donde se reduce el suelo edificable, que aún deberán de consultar detenidamente.
El único edil socialista, José Antonio Viña, discrepa del PP y TeGa e insiste en que ahora "lo prioritario" es aprobar el documento, por lo que dará su apoyo "por responsabilidad". Aún así, no descarta realizar algunas propuestas para introducir algunas mejoras.
La edil de Urbanismo, Milagros Lantes, confía en que el día 25 se presenten todas las sugerencias para agilizar su aprobación.
