El Ayuntamiento de Sada ejecutó durante el primer semestre del año el 11,4% de la inversión prevista en el presupuesto de este año. El informe sobre el estado de la ejecución presupuestaria del que dará cuenta al pleno el próximo martes recoge que de los 1,2 millones consignados tras las operaciones de modificación de crédito, el Ejecutivo municipal solo ha ejecutado 141.989 euros, aunque los pagos realizados ascienden a 72.937 euros.

El ritmo de ejecución del capítulo de inversiones no se corresponde con el gasto en conjunto. Según recoge el informe, el Concello ya había ejecutado en junio el 41,25% de los gastos previstos para todo el ejercicio. El desembolso contrasta con lo recaudado, muy por debajo de los que recoge el presupuesto. De los 130.000 euros que el Ejecutivo municipal tenía previsto ingresar por la vía de impuestos indirectos embolsó en los primeros seis meses 27.903 euros, el 21,46%.

La diferencia entre lo proyectado y recaudada es más llamativa en los ingresos patrimoniales. El Concello recaudó en los primeros seis meses del año el 1,97% de lo previsto en todo el ejercicio, 6.127 euros de los 310.200 previstos. En tasas y precios públicos, la recaudación asciende, en el ecuador del año contable, al 36,55%.

El informe ha disparado las alertas de los nacionalistas. El BNG sostiene que los resultados reflejan "algunos datos preocupantes" y "dejan al descubierto las previsiones irreales del PP si no mejora la gestión en lo que queda del año". Los nacionalistas critican que "pese a la caída de ingresos que se observa en el capítulo en los primeros seis meses del año, el conjunto de gastos siga el ritmo esperado y ya en junio el Gobierno local gastase el 41,25% de lo previsto para todo el año". "Es lamentable que delante de esta situación el Gobierno local lamente de gastar en fiestas, despilfarre en publicidad y propaganda y no haga nada por reducir en gastos". "El PP recurre a lo más fácil: meter la mano en el bolsillo de los sadenses subiendo el IBI", critica en un comunicado remitido a los medios en el que exige "más control con el dinero de todos y menos despilfarro".