Trabajadores de Grafoplas del Noroeste SA protestaron ayer a la puerta de la empresa para exigir que se readmita a los tres compañeros despedidos y evitar se que expulse a más personal. Los empleados se concentraron ante las instalaciones del negocio, en O Burgo, durante media hora, al finalizar el turno de mañana.

Los manifestantes aseguran que la concentración transcurrió sin altercados y con tranquilidad. El personal esperará ahora a que la dirección de la empresa de un paso e intentarán negociar para evitar más despidos. La concejal de Benestar y teniente de alcalde de Culleredo, Raquel Jabares (a la derecha en la imagen), se sumo a la protesta en apoyo a los trabajadores.