El Valedor do Pobo ha trasladado su "pleno apoyo" a las personas con movilidad reducida que en abril de 2014 se concentraron en la parada de autobús de Betanzos para exigir un "transporte para todos". Como informó este diario, los usuarios con discapacidad motriz del servicio interurbano de la línea A Coruña-Betanzos decidieron plantarse delante del bus para denunciar la ausencia de asientos adaptados, que se veían obligados a reservar con dos o hasta tres días de anticipación para que estuviesen libres.

La institución encargada de velar por los derechos de la ciudadanía incluye su queja en la memoria de 2014 e insta a la Xunta a articular las medidas necesarias para "que los autobuses dispongan siempre de espacios adaptados y no sea necesario avisar para habilitarlos", algo que, recalca, "resulta discriminatorio".

El Valedor do Pobo avanza en su memoria que ha solicitado en varias ocasiones a las consellerías de Medio Ambiente y Benestar que "garanticen los derechos de las personas con discapacidad". El organismo autonómico considera que "tampoco se ha clarificado suficientemente si las empresas concesionarias estaban adaptando progresivamente sus vehículos de acuerdo con la normativa".

Desmantelamiento del 065

La Xunta ha rechazado la recomendación del Valedor de prestar todos los fines de semana el servicio de transporte adaptado a una mujer "con una discapacidad del 98% y movilidad muy reducida" que permanece de lunes a viernes ingresada en el centro Sagrado Corazón de Betanzos. Hasta mediados del pasado año, Benestar le facilitaba los medios para que pudiese pasar los fines de semana en su casa de A Laracha debido a que su madre, de 86 años y con "pluripatologías" no podía recogerla. En febrero de 2014, la Xunta comunicó a la familia por teléfono que recortaba el servicio, que solo prestaría dos fines de semana al mes. El Valedor instó al Gobierno a mantenerlo como antes para que la joven esté más en contacto con su familia. Sin éxito.