La zona de Fontán y Pazos es para el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Sada un "área de expansión o crecimiento urbano natural". Esta idea de que la villa crezca en el entorno del recuperado castillo hizo que el anterior Ejecutivo cambiase de idea y si en el planeamiento aprobado inicialmente en 2012 marcaba como rústico de protección agropecuaria y paisajística el entorno de Fontán, Pazos y Figueiras en el plan del pasado abril convirtió esta bolsa de suelo en un área de reparto de suelo urbanizable delimitado y otra como urbano no consolidado, con la previsión de construir 253 chalés y pisos.

Una parte de esta bolsa de suelo entre Fontán y Pazos y la Rúa Pombal, en la zona de la curva de la carretera a Mera, era suelo de protección agropecuaria y paisajística en 2012 y este año el PXOM la transformó en el área de reparto AR-D1.2 de suelo urbano residencial. Habrá 155 viviendas entre chalés y seis edificios de bajo y tres plantas.

Al lado de este polígono, desde Pazos hacia las viviendas del Carmen, el suelo de protección agropecuaria y paisajística se convierte en otra área de reparto de suelo urbanizable en la que según el PXOM se construirán 98 viviendas aisladas o pareadas, de bajo y una planta.

Ambas actuaciones, la R1 y la D1.2, comparten el mismo acceso desde una rotonda en plena curva de Pazos, cuya construcción pagarán estas dos urbanizaciones en proporción a su aprovechamiento, y que las conectará desde la carretera al casco urbano y a Mera mediante un vial nuevo. El futuro plan parcial integrará en esta ordenación las viviendas existentes en esta zona.

El propio PXOM destaca que hay desarrollos urbanísticos en Sada que "demandan una pronta gestión y ejecución", siete en total y entre ellos estos dos de Fontán, por eso se prevé que se ejecuten por cooperación, es decir, que los promueva el Concello. Esta celeridad para construirlos se justifica, según el documento, en que llevan adscritas actuaciones como la ampliación del colegio, un nuevo centro de salud o el parque de Fontán.