Susto de campeonato en el CEIP Francisco Vales Villamarín de Betanzos. El sonido de la alarma del centro educativo alertó a sus ocupantes y a quienes se encontraban en el exterior, entre ellos padres y madres que aguardaban a que saliesen sus hijos de las clases, de que se había originado un fuego. Eran cerca de la una y media del mediodía. Enseguida cundió la intranquilidad y el nerviosismo.
La alarma activó de inmediato el protocolo habitual que se sigue en las instalaciones educativas ante una amenaza de incendio. El cuerpo de bomberos fue avisado de la alerta, así como Protección Civil y la Policía Local, que acudieron al centro con efetivos. En el interior del colegio, mientras, los profesores trataban de tranquilizar a los alumnos más nerviosos y hubo algún momento de cierto pánico. Hubo chicos que salieron de sus aulas, pero no se tardó en comprobar que en realidad se había producido un problema en el sistema de alarma y no había fuego en ninguna parte, por lo que no fue necesario que se evacuara el edificio.
Los bomberos comprobaron con rigor la instalación y la propia alarma, en la que se pudo haber producido un fallo técnico que provocó su activación. El susto había pasado, pero tanto los padres que estaban en el exterior del Vales Villamarín como los niños y niñas aún tenían la inquietud en el cuerpo.
