El Concello de Cambre tramita una segunda modificación del planeamiento para impulsar la urbanización de una unidad de actuación en O Graxal, al límite de la Nacional VI, en las inmediaciones de la emblemática Villa Concepción.
El objetivo que se marca el Gobierno municipal es modificar un convenio urbanístico en vigor para primar la implantación de un sector terciario. El Ejecutivo local ha decidido dar la vuelta al antiguo acuerdo, que preveía destinar un 70% del ámbito a uso residencial y solo el 30% al terciario.
El alcalde de Cambre, Óscar García Patiño, ha llegado a un acuerdo con los propietarios de los terrenos, según informó ayer el Concello a través de un comunicado remitido a los medios.
"Se trata de un acuerdo que, entendemos, mejorará la imagen de este margen de la Nacional VI, aumentará las dotaciones y espacios públicos, ordenará urbanísticamente una zona que no estaba integrada en el ámbito urbano de O Temple-Graxal, y generará un espacio para el desarrollo comercial que estamos seguros que posibilitará la creación de empleo", sostuvo ayer el regidor, que informará a la conselleira de Territorio del inicio de los trámites para esta modificación de las normas subsidiarias en una reunión el próximo 16 de marzo.
El Gobierno local destaca que el objetivo de este cambio en el planeamiento es "mejorar los equipamientos públicos en la parroquia de O Temple, dotar a la localidad de otra zona comercial "que genere puestos de trabajo" y "acabar con la deficiencia de ámbitos en el uso terciario privado que ordenen un enclave en estos momentos aislado y carente de servicios".
Entre los compromisos de los propietarios, el nuevo convenio establece la ejecución del saneamiento hacia O Graxal y el traslado del transformador eléctrico de la calle Curros Enríquez, explica el Gobierno local.
Es la segunda modificación urbanística que tramita el actual gobierno. La primera, todavía en el trámite de evaluación ambiental, prevé reordenar el centro de la capital municipal con la construcción de tres bloques de viviendas y de un vial que enlace la carretera de la estación con Pumar Méndez y la reserva de espacio para equipamientos, zonas verdes y aparcamientos.
El Concello tramita estos cambios en las normas subsidiarias para avanzar en el desarrollo de ambas unidades de actuación, ya que el plan general está en punto muerto. El Concello no lo someterá a aprobación inicial antes de la entrada en vigor de la Lei de Solo, lo que le obligará a adaptarse a la nueva legislación, con el consiguiente retraso. El Ejecutivo municipal todavía no ha tomado una decisión sobre el futuro del contrato en vigor.
