El producto estrella de Carral llenó ayer de vecinos y visitantes el campo da feria. Kilos de bollas, bollos con moño, empanadas o dulces se vendieron en el día grande de la Festa do Pan, que celebró este fin de semana su XIV edición. La jornada de clausura contó con exhibiciones de cetrería y de un caballero medieval, una concentración de motos, actuaciones musicales y talleres para formar en el oficio a los más pequeños, que se llevaron a casa bollitos con pintas de chocolate elaborados por ellos mismos y horneados en el campo da feira.

Los puestos de venta de pan y sus derivados despacharon también el "bocadillo cardiosaludable" -de jamón serrano con tomate y aceite de oliva-, que se vendía a cuatro euros con bebida incluida. Los panaderos compartieron espacio en la plaza con los puestos de la feria medieval y los expositores del comercio local de diferentes productos, como mueblería o textil. Los vendedores comenzaron la jornada a las 10.00 horas. La Charanga Mekánica ofreció actuaciones por la capital municipal a lo largo de todo el día y al mediodía hubo sesión vermú a cargo de la orquesta Cinema, que actuó de nuevo a la noche. La Coral Aires de Carral ofreció también un recital y la programación musical se clausuró con la actuación de la vecina Raquel Vázquez García, que presentó su disco. Los panaderos carraleses rindieron homenaje, además, a su patrón, San Honorato, con la celebración de una misa a las 12.30 horas.

La celebración contó entre sus visitantes con la conselleira de Medio Rural, Ángeles Vázquez, que ensalzó el pan gallego como "uno de los productos agroalimentarios de referencia en la comunidad". La conselleira acudió acompañada por la directora xeral de Ganadería, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, Belén do Campo, y el alcalde de Carral, José Luis Fernández Mouriño. Vázquez incidió en que la Xunta tramita la declaración de Indicación Geográfica Protegida para el pan gallego.