La transparencia nunca ha sido el fuerte del Consorcio As Mariñas. Desde su constitución en el año 2000, la entidad supramunicipal que aglutina a los concellos de Abegondo, Arteixo, Bergondo, Betanzos, Cambre, Carral, Culleredo, Oleiros y Sada ha celebrado plenos y asambleas a puerta cerrada. Una práctica que ha mantenido inalterable con independencia del partido que ocupase la presidencia y que la ley de transparencia y buen gobierno apenas ha conseguido variar. No sorprende por lo tanto que tantos partidos de la comarca reprochasen esta opacidad en la asamblea en la que el pasado viernes se aprobaron inicialmente los estatutos del nuevo ente, la mancomunidad.

Muchos fueron los concejales que criticaron que nunca se les ha informado de los acuerdos del consorcio y nunca se les ha dejado participar hasta el pasado viernes en la votación. La evidencia de la falta de participación y transparencia llevó al propio presidente de la gestora del ente a admitir este "error".

Pronto se cumplirán ocho meses de la entrada en vigor de la normativa que obliga a los organismos públicos a dar cuenta puntual a la ciudadanía de sus de sus resoluciones y el Consorcio As Mariñas ni siquiera publica en su portal de transparencia los acuerdos plenarios. Tampoco aporta actas de las asambleas o comisiones informativas que celebran periódicamente.

La entidad creada para prestar conjuntamente la recogida de basuras de As Mariñas y que asumió a lo largo de los años otras prestaciones, como lacería o asesoría jurídica, mantiene inactiva en su web la casilla que debería informar del coste, grado de cumplimiento y calidad de sus servicios. Las lagunas del Consorcio en materia de transparencia hacen que resulte complicado realizar un seguimiento de su actividad. El ente supramunicipal cuelga en la web una memoria anual, la última de 2014, en la que expone un balance de sus actuaciones y aporta estadísticas sobre algunos de los servicios, pero sin analizar el grado de cumplimiento.

Los datos contables tampoco están actualizados. El último presupuesto que se puede consultar es de 2014 y no está completo, tan solo el desglose de obligada publicación en el Boletín Oficial de la Provincia.

Otros apartados, como los que deberían dar cuenta del período medio de pago a proveedores, la relación de bienes de la entidad o convenios, siguen inactivos. El perfil del contratante tampoco da cuenta de todas las adjudicaciones. La última contratación de la que se informa es de 2015.

La falta de transparencia del Consorcio ha propiciado ahora las críticas del BNG (sin representante en la entidad), que denuncia que es prácticamente "misión imposible" conocer los acuerdos de la entidad y los asuntos que tratan los alcaldes en las reuniones a puerta cerrada.

Un portavoz del ente negó que los plenos fuesen a puerta cerrada, a pesar de que este diario solicitó sin éxito poder asistir a las sesiones. Desde el Consorcio sostienen ahora que solo las reuniones y asambleas de los representantes son a puerta cerrada y que las cuentas de la entidad están a disposición de los ciudadanos en la sede.

La falta de transparencia no es patrimonio exclusivo del Consorcio. Los concellos integrados en la entidad incumplen aún varias directrices de la ley. El caso más paradigmático es Oleiros, que sigue sin habilitar el portal obligatorio. El alcalde ha votado en contra de todas las iniciativas de la oposición dirigidas a poner en marcha la plataforma y no ha trascendido que se le sancionase. Aunque los portales de los nueve ayuntamientos presentan aún deficiencias, Bergondo, Sada, Cambre, Betanzos y Culleredo son los que ofrecen más información.