Una pareja de Miño presentará hoy una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil por los daños que ha sufrido su hija de dos años cuando jugaba en el parque infantil de Rabazal. Según explica su madre, Laura Varela, la pequeña tropezó con unos tablones mal colocados del área recreativa y, al caer, se clavó una astilla del "grosor de un lápiz" que le atravesó la mano. "Intenté levantarla y estaba enganchada en la tabla del suelo", relataba ayer la progenitora a consulta de este diario.

La joven fue atendida en el centro médico de Betanzos, donde le curaron las heridas, que no revisten gravedad. Desde el ambulatorio ya han trasladado de oficio el informe de los hechos al juzgado, por si considera oportuno abrir diligencias.

Los progenitores se mostraban ayer indignados por lo sucedido y atribuían el incidente a una negligencia del Concello de Miño en el mantenimiento de las áreas recreativas infantiles.

"No queremos una indemnización, solo que espabilen, no se pueden tener los parques infantiles en este estado de abandono", criticaba ayer el padre de la pequeña, Cristóbal Eiranova. "Es la primera vez que pongo una denuncia y lo hago porque no quiero que vuelva a pasar algo así y que otro niño sufra daños por la falta de mantenimiento", recalca.

Los padres afirman que el mal estado del parque ha salido a relucir en más de una conversación entre las familias que llevan a sus niños a jugar a la zona de Rabazal y que no solo presenta deficiencias en firme, también los juegos. "Hasta al tobogán le faltan peldaños", sostiene Cristóbal Eiranova. Una afirmación que corroboraba ayer la oposición, que criticó nuevamente el "abandono" de los espacios de uso público por parte del Gobierno local

El padre de la menor dejó ayer más que patente su malestar a través de las redes sociales. Relata que varias personas se pusieron en contacto con él para interesarse por lo ocurrido y por el estado de su hija, incluidos concejales de la oposición. "Del Gobierno local no me llamó nadie", criticaba ayer a consulta de este medio.