Los gestores del Córax Fauna, el denominado núcleo zoológico de Paderne que alberga más de cincuenta especies de animales salvajes en cautividad, tramitan actualmente los permisos para la apertura al público como parque zoológico. El Servizo de Conservación da Natureza de la Xunta publicó ayer en el Boletín Oficial de la Provincia el inicio del período de exposición pública del proyecto y la apertura del plazo de alegaciones.

Córax inicia los trámites para su conversión en parque zoológico un año después de que la Guardia Civil denunciase a los propietarios de esta especie de casa-zoo por desobedecer las órdenes de cierre. El Seprona emitió en septiembre de 2015 un comunicado a los medios para informar de la apertura de un expediente a los gestores de este recinto ubicado en San Xulián de Vigo. El instituto armado interpuso la denuncia tras comprobar que los animales se exhibían al público e interactuaban con los visitantes sin atender las órdenes de paralización.

La Xunta mantuvo entonces que las visitas guiadas que se desarrollaban en las instalaciones no disponían de los preceptivos permisos y que, ante la inacción del gestor ante sus requerimientos, le había impuesto una multa y prohibido exponer su colección zoológica al público. Desde la Consellería de Medio Ambiente sostuvieron entonces que Córax solo disponía de la categoría de núcleo zoológico, que no le habilitaba para las actividad de exhibición que realizaba.

Este centro ofertaba a través de su web a realizar itinerarios por el recinto, "interactuando con las especies que la componen". "Dar de comer a un mapache", "tocar a un lobo", "acariciar a un tigre" eran algunos de los alicientes que podían leerse en su portal.

Una de las últimas denuncias a las que se enfrentó el centro fue por la agresión de una mona a una visitante, pero fue archivada.

A consulta de este diario a raíz del expediente del Seprona, los gestores de Córax sostuvieron que "el establecimiento no estuvo abierto como zoológico en ningún momento" y que, por tanto, "nunca se realizaron actividades propias de un zoo". Desde el centro mantuvieron que las "escasas actividades que se realizan en el núcleo zoológico se ciñen a las autorizaciones y licencias de que disponemos".