La conselleira en funciones de Infraestruturas e Vivenda, Ethel Vázquez, se reunió ayer con los representantes de la Asociación de Veciños de Filgueira de Barranca para analizar las medidas de seguridad en la AC-840 a su paso por esta parroquia de Oza-Cesuras. El encuentro del colectivo y la responsable autonómica estuvo precedida de las quejas de los residentes por el rosario de accidentes que registra esta vía que atraviesa la aldea.

Hartos de aguardar una solución, el colectivo vecinal envío el pasado 20 de octubre un escrito a la Xunta en la que advertían de elevada tasa de siniestralidad que soporta esta vía, muy transitada, sinuosa y que carece de arcén y sendas seguras para que los peatones puedan desplazarse en condiciones de seguridad.

Entre otras medidas, los vecinos exigían que se limitase la velocidad en la zona, la construcción de una senda peatonal en uno de los márgenes, así como la instalación de bandas rugosas para obligar a los conductores a reducir la velocidad.

Parte de sus demandas fueron acogidas ayer por la responsable de Infraestruturas. Ethel Vázquez se ha comprometido a solicitar a la Dirección General de Tráfico (DGT) la instalación de un radar en la AC-840 a su paso por la localidad para que funcione como elemento disuasorio que empuje a los conductores a pisar el freno. La conselleira en funciones avanzó también a los vecinos que la Xunta revisará la señalización de limitación de velocidad en la carretera y que redactará un proyecto para mejorar el firme.

El compromiso del Gobierno gallego permitiría reducir la inseguridad en una tramo de la vía en la que los coches circulan a mucha velocidad y en la que se han registrado varios accidentes mortales. Y que convertía en actividades de riesgo "ir a una finca, visitar a un vecino, acudir a la iglesia o ir a la parada de autobús", como alertaban los vecinos en su escrito. Sin embargo, la Xunta no se pronuncia de momento sobre la petición del colectivo vecinal de una senda peatonal en uno de los márgenes. En su comunicado remitido a los medios, la Consellería de Infraestruturas tampoco hace alusión a la instalación de bandas rugosas, otra de las reivindicaciones vecinales.